Ya lo dijo López Caro la pasada semana, el Real Madrid cuenta con la mejor plantilla del mundo. Tanto es así que Zinedine Zidane puede mover las piezas de su rompecabezas a su antojo sin miedo a equivocarse. Las alternativas surgen solas en una plantilla muy completa que tiene varios jugadores con nivel de titular por posición.
Lo que es una bendición para el técnico es un problema para los jugadores. Hay algunos miembros de la plantilla blanca que han hecho méritos suficientes para hacerse con un puesto como titular en los onces de Zidane, pero la feroz competencia impide que sea así. Es el caso de Isco, James Rodríguez y Morata, quienes están ofreciendo un gran rendimiento sobre el campo, pero este es insuficiente para convencer a Zidane de que deben ser fijos en las alineaciones.
Isco, con el futuro en el aire
Uno de los jugadores más perjudicados por la enorme competencia que existe en el centro del campo del Real Madrid es Isco Alarcón. El malagueño está jugando el mejor fútbol de su carrera en el Santiago Bernabéu, pero sigue teniendo a Casemiro, Modric y Kroos por delante.
Sí es cierto que Isco es siempre la primera alternativa que baraja Zidane para suplir a uno de los tres del centro del campo, pero aún no ha conseguido la condición de titular fijo. Esta temporada ha disputado 20 partidos de Liga, 12 de ellos como titular, y ha anotado 6 goles. Además, ha jugado a un gran nivel y ha sido quien ha desatascado algunos partidos en los que el equipo no ha mostrado su mejor versión, como en el partido frente al Villarreal en el Estadio de la Cerámica.
Todo el mundo sigue pendiente de Isco, pues su continuidad en el club sigue siendo una incógnita en el Real Madrid. Él quiere seguir vistiendo la blanca, pero a sus 24 años necesita afianzarse como titular y si no lo consigue en Madrid, buscará su lugar en otra parte.
James Rodríguez, aprovechando oportunidades
El caso de James es diferente al de cualquier jugador de la plantilla del Real Madrid. El colombiano llegó al Bernabéu en verano de 2014 y esa temporada, la 14-15, la dibujó con un pincel de oro, siendo uno de los mejores del equipo y demostrando que tenía calidad de sobra para justificar el enorme desembolso realizado por Florentino Pérez. Sin embargo, su rendimiento cayó en picado la pasada temporada. Una serie de actuaciones mediocres le llevaron al banquillo y desde entonces no ha logado recuperar el puesto de titular indiscutible que consiguió en la temporada de su debut.
Ahora, James ha vuelto a brillar. Sus actuaciones esta temporada sí se parecen algo más a las que cuajó en su primera campaña. No obstante, el tridente Casemiro-Modric-Kroos se ha hecho con el poder en la medular blanca y es muy difícil meter mano ahí. Además, Isco le ha comido la tostada y es siempre la alternativa ofensiva de este centro del campo por delante de él.
Esta temporada, James ha disputado 20 partidos entre todas las competiciones, pero solamente en la mitad lo ha hecho como titular. El colombiano no está teniendo demasiadas oportunidades esta temporada y ya ha hablado en varias ocasiones sobre una posible salida del Real Madrid. Si no logra convencer a Zidane, es posible que abandone el club este verano.
Morata, goles como aval
El gran demandado por la afición. Álvaro Morata regresó al Real Madrid el pasado verano para intentar hacerse con un hueco en el equipo de sus amores. Los méritos los está haciendo, pero aún no es suficiente para que Zidane le otorgue el puesto de delantero centro por delante de Karim Benzema.
Morata ha jugado 29 partidos esta temporada entre todas las competiciones. Pese a no ser titular en muchos de ellos, ha anotado 13 goles y es el jugador con mejor promedio goleador del Real Madrid esta temporada. Esto, sumado a la mala racha goleadora que está atravesando Benzema esta temporada, le coloca como seria alternativa al francés, que por otro lado es muy del agrado de Zidane.
Los goles son la principal baza de Morata para solicitar un puesto en el once de Zinedine Zidane. De momento cuenta con ese aval y está haciendo méritos para sumar muchos más minutos, pero sigue sin encontrar su sitio.
La gran competencia que provoca tener una plantilla tan potente como la del Real Madrid provoca injusticias difíciles de resolver. Isco, James y Morata están teniendo un gran rendimiento y aprovechando las oportunidades que les brinda el míster, pero cuando compites con los mejores jugadores del mundo, un puesto en el once es muy caro.