No cabe duda de que la competición fetiche del Atlético de Madrid es la Copa del Rey. En los últimos tiempos ha servido para saciar la sed de títulos y lograr además, algún que otro hito en casa del eterno rival. Este año todo apuntaba diferente con motivo de la mala racha goleadora. Hasta que el Estadio Metropolitano ha vivido sus primeros noventa minutos coperos. Noventa minutos que quedarán para la historia gracias a la consecución del primer triunfo colchonero y el primer doblete de Fernando Torres en el nuevo feudo. Además de las fantásticas sensaciones mostradas sobre el verde, que han valido para confirmar lo que se vivió la semana pasada en el Ciutat de València: que los del Cholo están de vuelta y quieren ganar la Copa.
A pesar de las obligadas sustituciones que Diego Pablo Simeone realizó, el equipo de rotación, por mencionarlo de alguna manera, funcionó a las mil maravillas. Volvieron los tan ansiados goles y el Metropolitano por fin sonrió de manera plena. Todo arrancó gracias al todoterreno José María Giménez, que hizo el gol inaugural copero y desató la euforia de los casi cincuenta mil aficionados desplazados hasta el barrio de San Blas. No falló la afición. Nunca lo ha hecho. Es más, apoyó incontestablemente al equipo aunque la paciencia con Nico Gaitán y Luciano Vietto pareciera desatarse por instantes. Pero en el Atleti son todos hermanos. Luchan como tal. Y mientras un jugador permanezca defendiendo tu escudo, has de respaldarlo a muerte. Como siempre ha ocurrido con Fernando Torres, la otra cara de la moneda, pues el Niño, ya no tan niño, quiso también formar parte de la nueva historia rojiblanca al conseguir sus primeros dos goles al este de Madrid.
Tanto Liga como Champions se presentan muy complicadas, que no imposibles, de ganar. Quedaría la Europa League, que buenas y múltiples alegrías ha dado, sí. Pero en la fase actual de transición que está viviendo el Atlético de Madrid, nada le podría venir mejor que obtener su undécima Copa del Rey. Por ello, aficionados y en especial Frente Atlético han vuelto a poner en marcha a través del habitual hashtag, la mítica frase con la que arrancan estas líneas: "Queremos ganar la Copa". Y es que los indios no piensan en otra cosa. Solo en ganar, ganar, y volver a ganar. Porque este equipo es filosofía y trabajo continuo, y no van a parar hasta demostrárselo a todo el mundo.
Así lo cree también el Cholo, aunque sus palabras en rueda de prensa no parezcan decir lo mismo. Pero con el argentino hay que saber interpretar: "Sabemos que la Copa es compleja, se están dando muchas sorpresas. Cuando te relajas no llegas a volver a reengancharte al partido, es casi imposible, el rival siempre está activo. Por ello hay que estar atento y trabajar sin parar durante todo el partido". Esas son las claves que necesitan los rojiblancos para hacerse con el título copero. Sacrificio, trabajo, coraje y corazón. Y afortunadamente, no falta ninguna de ellas para dejar de soñar y creer.