El Málaga finaliza su peor racha de goles encajados en Primera

Tras 28 goles recibidos, los blanquiazules consiguen dejar la portería a cero 14 jornadas después

El Málaga finaliza su peor racha de goles encajados en Primera
Roberto blocando un balón en el Málaga-Levante | La Liga
juanyroldan11
Por Juany Roldán

El pasado viernes La Rosaleda vivió una situación extraña, un empate a cero, algo que no se veía en Martiricos desde el 13 de septiembre del año 2015, cuando el Málaga de Javi Gracia y un Eibar conformado por varios jugadores más que conocidos a día de hoy, como Borja Bastón, Adrián González o Keko Gontán  se repartieron los puntos.

Este último empate frente al Levante supuso el fin de una mala racha, puesto que en las 14 jornadas que llevamos disputadas de La Liga Santander el equipo de Míchel había encajado gol en todos y cada uno de los partidos, con un total de 28 goles en contra. Con estos malos números se da por terminada la peor racha de goles encajados por el Málaga en Primera División.

Los goles en contra que el conjunto blanquiazul viene recibiendo esta temporada pone de manifiesto las debilidades defensivas del equipo y suponen un gran lastre para las aspiraciones que se pretenden conseguir a final de temporada, o dicho en otras palabras mantener la categoría, puesto que en 10 de los partidos de lo que llevamos del campeonato doméstico el Málaga ha comenzado perdiendo. Solo en uno de esos choques, el equipo logró remontar el partido, consiguiendo un memorable empate a tres frente al Athletic Club en casa. En los partidos que ha ganado esta temporada (2-1 frente al Celta de Vigo y 3-2 frente al Deportivo de La Coruña) el equipo de Míchel comenzó ganando con un gol de Adrián al final del primer período en el primero y con un zapatazo de Roberto Rosales tras un saque de esquina en el segundo.

El próximo fin de semana el Málaga visita Anoeta para enfrentarse a una dolida Real Sociedad, tras la eliminación copera frente al modesto Lleida y la derrota en el Wanda Metropolitano, por lo que será imprescindible dejar de nuevo la portería a cero para puntuar.