El Racing se aprovechó de las necesidades clasificatorias del Lealtad y mostró su superioridad en un partido en el que los cántabros consiguieron romper una racha de más de dos meses sin ganar fuera de El Sardinero. Y lo hizo en un campo que está siendo propicio en las tres últimas campañas, donde el hermanamiento entre aficiones y clubes se ha convertido en más que una tradición. Ante casi mil quinientos seguidores cántabros, el Racing por fin enlazaba la tercera victoria consecutiva y comprimía las distancias entre los equipos de cabeza de este grupo segundo.

Con varios cambios en el once de Carlos Pouso, el Racing inició el partido con mucha más intensidad que un rival que venía de afrontar un duro partido entre semana. Fruto de esa presión, el Racing consiguió casi sentenciar el partido con sendos goles de Borja Lázaro y Dani Aquino, jugadores de un nivel superior a la categoría.

Desde ese instante y con setenta minutos por delante, el Racing consiguió dominar el centro del campo y maniató a un Lealtad que apenas pudo acercarse a las inmediaciones de la portería defendida por Iván Crespo. Lo más destacado del partido fue, quizás, la presencia del jugador del filial racinguista Jerín Ramos, centrocampista que vino a sustituir a Quique Rivero. Y el joven jugador verdiblanco cuajó un buen partido, aportando trabajo físico y equilibrio a un equipo que venía adoleciendo de ello a lo largo de la temporada.

Con un partido casi sentenciado, Robert acortó distancias para sembrar la inquietud entre la masiva presencia de aficionados cántabros. Sin embargo, el Racing consiguió dormir el partido e incluso pudo aumentar la diferencia pero los arietes santanderinos no estuvieron acertados. El Lealtad buscó el empate con más corazón con cabeza pero sus intentos a la desesperada morían sin peligro en la frontal del área.

Jerín Ramos

3 | Grata sorpresa. El jugador de origen caboverdiano jugaba su tercer partido con la primera plantilla racinguista y brilló con luz propia, aportando mucho trabajo en el centro del campo, interviniendo directamente en el robo de los balones que iniciaron los dos tantos santanderinos. Además, fue clave en juntar las líneas del equipo y equilibrar los balances defensivos del equipo. Su buen hacer pudo ser completo si alguno de los disparos que intentó desde la frontal hubieran encontrado la portería.

Dani Aquino

2 | Calidad. El murciano es un seguro de vida para el Racing. No solo aporta goles (consiguió el undécimo de la temporada) si no que, además, inculca al equipo una agresividad que mejora ostensiblemente la actitud del equipo. Sus excesivas ganas muchas veces le hacen estar presente en zonas del campo que no le corresponden pero su garra y su ambición contagian al equipo.

Miguel Gándara

3 | Contundencia. El joven jugador se ha convertido en un fijo en la zaga santanderina, bien sea en el centro de la defensa o en el lateral. En este partido, Carlos Pouso optó por defender la banda derecha con el canterano racinguista y la verdad es que no defraudó. Aportó seguridad defensiva, estando muy atento en las coberturas y participó en varias salidas en ataque. Sin duda, está siendo el mejor defensor del Racing en los últimos partidos.

VAVEL Logo
Sobre el autor
Esteban Ortiz Crespo
Licenciado en Comunicación Audiovisual y Periodista.