La Real Sociedad Gimnástica de Torrelavega regresa esta campaña a la división de bronce del fútbol español. Tras un largo periplo por la Tercera División cántabra, el conjunto torrelaveguense conseguía, por fin, regresar a una categoría que nunca debió abandonar.
Su ausencia se debió a una grave crisis económica que provocó que gran parte de la plantilla de la temporada 2012/13 denunciara al club por impagos y, por tanto, la Federación Española de Fútbol no tuvo muchas más opciones que descender al club cántabro.
Tras superar parte de las adversidades, el club afronta la temporada con optimismo e ilusión y un presupuesto para la primera plantilla que ronda los 250.000 euros, cantidad con la que se hace un esfuerzo muy grande para intentar lograr la permanencia.
A pesar de ello, los problemas económicos siguen existiendo y la junta directiva trabaja imperiosamente para intentar generar recursos que puedan paliar las deudas. Una fuente de ingresos importante para el club es la generada por los abonados. Hasta el momento, cerca de 1.200 aficionados han retirado ya su carnet y se aspira a alcanzar la cifra de 1.500 abonados.
Pablo Lago continúa como entrenador
El técnico asturiano llegaba al club a mediados de la pasada campaña para intentar mejorar una situación que se había complicado, con un mal ambiente en el vestuario y con una crisis de resultados que llevaron al conjunto blanquiazul a estar fuera de los puestos que daban acceso a la promoción de ascenso.
Pablo Lago, con poca experiencia en los banquillos, intentó cambiar la dinámica de un equipo en crisis. Con sensatez y mucho trabajo consiguió enderezar la situación y llevar al club a ganar el campeonato. Con la euforia disparada, en el partido por el ascenso, los de Torrelavega doblegaban al Mallorca B para retornar a la Segunda División B.
Jugador profesional durante varias temporadas, llegó a jugar en primera división con Las Palmas y con el Racing de Santander. Esta campaña, el entrenador gimnástico debuta en la categoría y ha confeccionado, junto al director deportivo de la entidad Carlos Chalana, una plantilla que da un salto de calidad en relación a la que consiguió el ascenso.
Con el claro objetivo de conseguir la permanencia, Lago pretende crear un buen bloque defensivo, capaz de crear peligro con sus delanteros y muy fuerte en la estrategia.
Fichajes
La entidad ha logrado mantener a gran parte de los jugadores que consiguieron el ascenso la pasada campaña, además de reforzar determinadas líneas que buscan la polivalencia de los jugadores para ocupar varias posiciones.
El portero Adrián Peón (Racing B), los defensores Cristian Moreno (CD Vitoria), Diego Bardanca (Ibiza), Luis Matías Hernández (Rayo Cantabria) y Borja Docal (Dinamo de Brest) llegan para afianzar la parte más debilitada del equipo. También han llegado Cusidor (Burgos), Alberto Gómez (Caudal), Daniel Salas (Bansander), Diego Rozas (Racing B) o Barbero (Don Benito). Otra de las incorporaciones importantes ha sido la de Primo, que regresa a la Gimnástica tras su paso por la Sociedad Deportiva Compostela.
El club se ha tenido que adaptar a las limitaciones presupuestarias y ha intentado incorporar a jugadores cántabros y con experiencia que venían militando en clubes de fuera de la región. Alguno de ellos, retornan a la entidad torrelaveguense tras abandonar el equipo en temporadas pasadas.
La pretemporada
La Gimnástica de Torrelavega ha disputado siete partidos durante esta pretemporada. Con un balance de dos victorias (Cayón y Rinconeda), tres derrotas (Oviedo, Real Sociedad B y Peña Sport) y dos empates (Naval y Racing B), el equipo que entrena Pablo Lago llega en óptimas condiciones para afrontar el inicio liguero.
Expectativas
Sin ninguna duda, esta temporada es la de la ilusión. Ilusión por parte de la entidad, la decana del fútbol cántabro, e ilusión en una afición y comarca que necesitaba dar un salto de nivel y de calidad en su equipo.
Después de lograr el ansiado ascenso, desde todos los ámbitos del club se ha manifestado el objetivo principal de alcanzar la permanencia.
Además, este año se une una circunstancia muy especial y es que el Racing de Santander, dominador del fútbol cántabro durante muchos años, compite en la misma categoría que los torrelaveguenses. Este hecho ha disparado aún más le rivalidad histórica entre ambas entidades que volverán a verse en un campo de fútbol en competición de liga oficial 27 años después.
Por tanto, muchos son los alicientes que ofrece este campeonato para la Gimnástica de Torrelavega. El hecho de estar ausentes en la categoría durante tanto tiempo ha fortalecido a una entidad que trata de luchar contra los elementos para afianzarse en la Segunda División B y poder mejorar su delicada situación económica y dar estabilidad y futuro a uno de los clubes deportivos más antiguos de Cantabria.