El derbi tiño de azul la capital del Principado y transcurridos los 90 minutos reglamentarios lleno de alegría a los aficionados carbayones. El partido tenía que ser especial y superó las expectativas, la comunión de la grada con el equipo no se había victo en la campaña actual. Todo salió a pedir de boca para los intereses ovetenses.

La versión dada por el equipo azul en los primeros 45 minutos fueron los mejores hasta la fecha, un juego directo, con intensidad y con acierto de cara a gol. La intensidad se tradujo en goles, lo que hizo verse un Real Oviedo muy superior a su rival. No todo fue bueno por parte de los azules, la falta de acierto hizo que no se cerrase el partido antes del descanso.

En la segunda parte las tornas se cambiaron, la iniciativa la llevaba el rival pero sin generar peligro y el Real Oviedo hilvanar jugadas. Todo se jugaba en tierra de nadie hasta el penalti y el primer gol rojiblanco. Pero el Oviedo no se deshizo y siguió sin conceder nada e incluso pudo ampliar la ventaja. 

Anquela decidió cambiar de nuevo el once titular, parte obligado por la bajas y arte por el partido realizado en tierras gallegas. La línea defensiva, inédita hasta entonces, mostró seguridad y conceió muy poco al equipo rojiblanco. Destacar el buen papel del central mejicano Osvaldo Alanís, se situó en la posición de libre ejerciendo como patrón de la defensa, inmenso en la acciones de cabeza como se demostró en el segundo y siempre bien colocado para asistir a sus compañeros en la cobertura. En la medular tanto Ramón Folch y especialmente Sergio Tejera se impusieron a sus pares, el medio ex del Nástic jugó un partido simplemente perfecto, aporto en ataque y en defensa, pero sobre todo no cejó un solo segundo de luchar por el equipo. En lo ofensivo destacar el momento dulce de Ibrahima Baldé, el gol es la mayor muestra de ello.

Estos tres puntos debería reforzar el trabajo del cuerpo técnico y jugadores que tanto necesitaban. El Real Oviedo repetirá partido en su feudo y sabe que si juega igual tendrá muchas opciones de llevarse los tres puntos.