El Real Valladolid vuelve a Zorrilla, vuelve el fútbol a la ciudad, vuelve la Liga Santander a la capital castellana. Y lo hace contra un equipo recién ascendido, motivado y sin nada que perder. Los rojillos llegan a Valladolid invictos viniendo de empatar a todo un Barcelona en el Sadar. Los chicos de Jagoba Arrasate se encuentran en una sexta posición cómoda en este inicio de liga con 5 puntos, uno más que los pucelanos.

La pretemporada en tierras holandesas ha servido para motivar al equipo y crecer como conjunto. Sin embargo, la permanencia sigue siendo el único objetivo y sobre todo para un recién ascendido que sueña con quedarse otra campaña en la élite del fútbol español. Su límite salarial es más alto que el de los blanquivioletas que solo supera al Mallorca en esa faceta. Los ingresos televisivos han hecho que el balance de fichajes sea positivo ya que se han tenido que reforzar en defensa, en el medio y en ataque con Chimy Ávila, de momento satisfecho con el trabajo realizado.

Lo que está claro, que el Osasuna y el Valladolid son dos equipos que tendrán que pelear por quedarse en primera. En estos primeros tres partidos ya han ganado fuera de casa y han conseguido sacar algo positivo contra Barcelona y Madrid, respectivamente. Será un duelo intenso e igualado donde el que golpee primero se lleva los tres puntos. El Real Valladolid sólo ha conseguido ganar 11 duelos al Osasuna en Zorrilla, un equipo que casi siempre ha volado a su ciudad con algún punto en el bolsillo. El ambiente será el que decidirá el partido, la afición está volcada con el equipo y la ciudad lo nota. Hay ganas de fútbol, de goles y sobre todo de la primera victoria en casa, que ya toca.