El Real Madrid se va a descansar con los deberes sin hacer. Las meritorias gestas llegadas a la institución blanca en forma de saboreadas victorias, como la de Barcelona en el Clásico (1-3) y en la “Casa Blanca”, frente a un poderoso Inter (3-2), se tornan en un sabor amargo cuando “despides” la liga durante casi dos semanas. Episodios dignos de serie dramática se han vivido en el entorno madridista en los últimos días, comenzando por las bajas de Militão, Casemiro y Hazard víctimas de la pandemia y continuando por la que se suma con la lesión de Valverde, el Real Madrid pierde muchas de las piezas claves de su esquema y con ello se va esfumando el anhelado proyecto de equipo por el que tan ansiado se mostraba Zidane. Por otro lado, el Madrid da inicio al parón de Liga con una de las derrotas más perversas de la temporada en un partido de escándalo que sembraba en Mestalla 4 goles en contra de los blancos, tres de ellos de penalti, todo un drama para los madridistas que solo pudieron dejar el recado de un único gol de consuelo.

El antes y el después de una defensa en obras

Desde la marcha de Cristiano, se sentaron las bases de un nuevo Madrid. Este equipo se construía ahora sobre la fortaleza de una defensa que iba a sacar de muchos apuros a un conjunto en el que una nota “sobresaliente” de la zaga sería el complemento perfecto a una calificación de “suficiente” en el índice goleador. La línea defensiva que conformaban Marcelo-Ramos-Varane-Carvajal, acompañada de un Courtois imparable que se hizo la temporada pasada con el Zamora, se configuraba en la capital como una imponente y poderosa muralla difícil de penetrar. Hacer mella en la portería blanca se convirtió por aquel entonces en misión imposible, una pesadilla para el conjunto rival.

Mucho han cambiado las cosas desde entonces, pues en esta nueva temporada el Real Madrid ha visto su portería perforada hasta en 7 ocasiones consecutivas: Cádiz, Shakhtar Donetsk, Barcelona, B. Mönchengladbach, Huesca, Inter y Valencia. La defensa merengue hace aguas y son los números los que lo corroboran: 1,1 goles recibidos por partido en Liga, cifra que asciende hasta los 1,45 goles recibidos si contamos la Champions League. En la temporada pasada, por el contrario, el Real Madrid recibía 0,9 goles por partido.

Cádiz - Real Madrid, el origen de una defensa que hace aguas  |  Foto: Real Madrid
Cádiz - Real Madrid, el origen de una defensa que hace aguas | Foto: Real Madrid

 

El ataque no es el punto fuerte de la institución blanca. Que Karim Benzemá sea el máximo goleador del cuadro, con 6 tantos y que le acompañen Vinicius (3) y el recientemente lesionado Fede Valverde (3), quien ocupa su lugar en la medular y no en las posiciones ofensivas; pone en evidencia a un Madrid con carencias ofensivas y falta de gol, algo que lleva siendo cuestionado desde el principio de temporada para los pupilos de Zidane. El técnico madridista ha mostrado siempre su mejor cara ante la lluvia de críticas y ha defendido con uñas y dientes a los suyos, sin embargo sabe, y mejor que nadie, que en cuestiones defensivas el francés tiene mucho que trabajar.

Los señalados: Los buenos, los feos y los malos... y los anhelados

La portería de Courtois ha sido profanada en esta temporada en 9 ocasiones en Liga y  7 en Champions (en ésta competición solo ha disputado tres encuentros). Del guardameta no se puede reprochar nada; y es que en términos generales, ha mostrado un buen nivel que, lejos de las críticas, lo que ha evitado es un adorno mayor en el marcador rival. Mendy es otro de los buenos,  un portento defensivo que se ha construido como la mejor opción para el carril izquierdo y, partido tras partido, ha hecho que su trabajo cobre importancia en el verde.

Una de las figuras más señaladas de la temporada es  Marcelo. El brasileño ha estado presente en todas las derrotas de la última etapa de Zidane como entrenador. Sin el lateral, los números son más favorables, con 20 victorias y 9 empates. Está infinitamente alejado de su mejor nivel y su rendimiento ha caído en picado . Varane continúa frustrado con errores defensivos latentes y Militão ha dado poco, en lo poco que ha podido ofrecer al equipo antes de sumarse a las bajas en la defensa blanca, acompañando a Carvajal y Odriozola. La zaga del Real Madrid se encuentra en uno de esos momentos de nostalgia en los que se recuerdan aquellas figuras a las que se dejó machar, jugadores como Achraf Hakimi, que continúa creciendo en el Inter, donde ahora se consolida como una pieza clave objeto de anhelo para los merengues; o Sergio Reguilón, también clave para los suyos, en un inmenso Tottenham que pelea por el liderato. 

Marcelo, el principal señalado en la defensa.  |  Foto: Vavel
Marcelo, el principal señalado en la defensa. | Foto: Vavel

 Es evidente que el Real Madrid sufre una importante crisis en su defensa que deja importantes heridas en lo que al conjunto del equipo se refiere. Los resultados lo corroboran. Zinedine Zidane tiene la complicada tarea de reformar a un equipo que se encuentra en uno de sus peores momentos en lo defensivo.