En las últimas semanas diversos medios sitúan a Marcos Alonso en la órbita del Atlético de Madrid. El carrilero español del Chelsea se encuentra en el ostracismo esta temporada. Tan solo ha disputado 3 partidos en lo que va de campaña y no entra en los planes de Frank Lampard, por lo que vería con muy buenos ojos volver a España para jugar en el Atlético.
El nombre del madrileño siempre ha estado vinculado con el Atlético de Madrid, ya en su etapa en la Fiorentina sonó como refuerzo colchonero pero acabó en el Chelsea. Una vez en Londres también se le relacionó con el club del Manzanares pero nunca pasó de rumor. Pues bien, los rumores vuelven a aparecer y esta vez aunque no haya nada concreto, parecen sonar con más fuerza que nunca.
Alonso se trata de un Carrilero o lateral izquierdo muy ofensivo. Se encuentra más cómodo jugando con defensa de tres y actuando como carrilero, esquema que el Atlético está utilizando mucho este curso. Posee un físico poderoso (1,88), velocidad y buen disparo.
Su trayectoria
Marcos Alonso proviene de una familia de futbolistas. Su padre, también llamado Marcos, jugó en el Barça y en el Atlético de Madrid entre otros clubes y su abuelo apodado "Marquitos" se desempeñó en el mítico Real Madrid de Di Stéfano.
El actual jugador del Chelsea ingresó de muy pequeño en la cantera del Atlético, para después irse a la del Real Madrid. En la Fábrica fue subiendo categorías hasta llegar al Castilla. Jugando para el filial madridista fue convocado por Pellegrini para jugar con el primer equipo ante el Racing de Santander. Debutó en ese partido que los blancos acabaron ganando por 2-0.
La siguiente campaña ante la falta de oportunidades en el Madrid, emigró a Inglaterra para jugar en el Bolton, equipo que entonces jugaba en la Premier League. Con "The Trotters" jugó tres temporadas hasta que se marchó a la Fiorentina, con una cesión al Sunderland entre medias.
En Florencia empezó a destacar y hacerse más conocido, hasta que en el verano de 2016 aterrizó en Londres para jugar en el Chelsea. Con los "blues" se convirtió en un fijo de Conte e hizo unas muy buenas primeras temporadas.
Este año sin embargo no cuenta en absoluto para Lampard, no entrando siquiera en las convocatorias, por lo que su salida está cerca.