El Barcelona no está pasando por su mejor época, después de caer en una estrepitosa crisis económica que ha alejado del Club ha figuras como Leo Messi. Sin embargo, la parte deportiva tampoco está ayudando a solventar la situación, pues el primer equipo sigue de capa caída y agravando la mala dinámica en Europa.

Tras un estreno de UEFA Champions League doloroso ante el Bayern de Múnich, donde los alemanes se impusieron por 0-3, este miércoles los azulgranas se enfrentaban directamente al Benfica con la necesidad imperial de regresar a casa con los primeros tres puntos de la temporada. Sin embargo, un nuevo mal planteamiento y juego de todo el conjunto, sentenció un 3-0 en contra que deja hundido al barcelonismo.

Tras la derrota, Ronald Koeman atendía a la prensa: "Es una situación delicada, lo entiendo perfectamente. Tenemos que intentar dar tiempo al equipo, aunque somos inferiores en el físico y la velocidad", decía el holandés, muy cuestionado.

Koeman, sentenciado en el banquillo

El entrenador, muy cuestionado por su trabajo desde el banquillo, respondía tajante: "Al final, el culpable es el técnico, pero en muchas fases del partido el planteamiento ha sido bueno", decía para añadir después: "A partir del 2 a 0 hemos tenido muchos problemas, hemos sido inferiores en la efectividad".

El Barcelona es el último clasificado del grupo, aún sin puntos, algo que puede complicar su clasificación para los octavos de final. Así lo veía Koeman desde la sala de prensa de Lisboa: "Creo que podemos clasificarnos. Si ganamos los dos partidos contra el Kyev y el Bayern hace lo mismo con el Benfica, nos quedará un partido en el Camp Nou, no será tan complicado", decía confiado el técnico.

Por último, y tras varias preguntas por si su futuro sería lejos del Barça, el holandés respondía: "No puedo decir nada de mi futuro. No sé qué piensa el Club en este sentido", para finalizar la rueda de prensa en el Estadio da Luz.