La madrugada del 20 de julio en España, el Barcelona disputaba en Miami su primer partido de la gira americana, tras el empate ante el Olot en el primer amistoso de la pretemporada, y en el cual buscaban la primera victoria del verano. 

El encuentro estaría marcado por muchas novedades, la ausencia de Xavi en el banquillo por motivos burocráticos que le impidieron viajar a Estados Unidos. Quien sí estaría en el banquillo sería Robert Lewandowski, el delantero polaco recién fichado no disputó ningún minuto, pero ya vivió el duelo como un compañero más.

Los debutantes cumplen e ilusionan  

Por mucha expectación que levantará el atacante ex del Bayern, las miradas estaban puestas en el césped donde algunas de las demás incorporaciones harían su debut con el Barça. Ellos fueron Christensen y Raphinha, el zaguero nacido en Dinamarca no tendría demasiado trabajo en su primer partido como culé, estuvo atento en las pocas llegadas del rival y con el balón demostró tener lo que necesita un central en Can Barça. En los próximos partidos, quizás más exigidos, se irá midiendo la capacidad del defensa. En cuanto a al brasileño, no pudo tener un debut mejor.

Un gol y dos asistencias, es decir, participo directamente en tres de los seis goles que marcaron los azulgranas. Asistiría a Aubameyang en el 1-0, haría el 2-0 rematando un gran centro de Balde y repetiría asistencia, esta vez, a Ansu Fati para que el diez transformara el 3-0 al filo del descanso. Del primer tiempo, además de los debutantes, destacar a Nico, Kessie y Balde, ambos rindieron muy bien en sus respectivas posiciones. 

Un equipo con olfato goleador 

En el segundo tiempo, Óscar Hernández, el segundo entrenador y hermano de Xavi, cambiaría por completo el once con el objetivo de dosificar los minutos y hacer que toda la plantilla vaya cogiendo ritmo de competición.  El ritmo de juego decreció respecto al primer tiempo y la presión ya no era tan intensa. Aun así, los segundos 45 minutos dejarían tres nuevos goles, los autores serían Gavi, Memphis y Dembélé. Mencionar que Frenkie De Jong jugó de central todos sus minutos, en los próximos partidos se verá si va a ser un recurso habitual.