El charrúa José María Giménez sigue demostrando el compromiso que tiene con este equipo, el Atlético de Madrid. Sin ser un habitual en el XI de Simeone y siendo central, cada vez que se le necesita en otra parcela del campo que no sea la suya, no pone pegas y juega realmente bien. Si hace unos días confirmó que como mediocentro funciona, y muy bien, dando una exhibición en el King Power Stadium, en el partido contra el Espanyol tuvo que actuar como lateral derecho, tras la reciente lesión de Juanfran y la del croata Vrsaljko, y volvió a cumplir.

Tras el partido atendió a los medios de comunicación en zona mixta y al ser preguntado por el partido dijo que “estamos contentos por ganar aquí porque no es un campo fácil. Veníamos de una semana con un partido de Champions y hemos jugado hoy contra un rival muy fuerte. Ahora ya pensamos en el martes”, añadió.

“Es admirable como jugador. Lo hace todo bien. Felicitarlo por los 100 goles, porque se lo merece. Es un jugador que y quiere más”, dijo sobre su compañero Antoine Griezmann.

“Siempre trato de dejar el máximo de mí. Estoy contento por la oportunidad que me están dando”.

También fue preguntado por su polivalencia en el campo: “Me siento cómodo donde el equipo me necesite. Siempre trato de dejar el máximo de mí. Estoy contento por la oportunidad que me están dando”.

Con estas palabras confirma lo que vemos en el campo por parte del joven uruguayo: entrega y sacrificio. Una joya que tiene que cuidar el Atlético de Madrid, ya que no olvidemos de que tiene 22 años, un futuro espectacular y una lista de pretendientes cada vez más amplia. Como central, como mediocentro o como lateral hay un gran jugador. Y si el club y jugador quieren, lo habrá para una década.