El madrileño resumió el partido realizado por el Málaga: “En la primera parte nos ha faltado decisión y convicción. En la segunda hemos estado mejor. Los cambios han ayudado al equipo a tener mejor posición y mejor llegada y hemos sufrido menos en defensa. Teniendo más posesión hemos sufrido menos, en la primera parte perdimos la posesión y nos han hecho bastante daño, pero en la segunda parte el equipo ha ido a más. Había mucha tensión y mucha igualdad, aunque en la segunda parte estábamos más cerca de culminar en gol alguna de las jugadas que teníamos cerca del área”.
Comentó los momentos del partido que menos le han gustado: “En la primera parte no me ha gustado nada. Nos ha faltado tranquilidad con el balón. No entrábamos en juego porque regalábamos el balón, no estábamos bien posicionados. Ellos nos pusieron en una situación muy peligrosa. La sensación es que nos podían hacer daño. En la segunda parte hemos ido a más. Nos falta ese punto de convicción y de soltarnos. Cuando uno juega en la parte de la clasificación que estamos jugando, dejar la puerta a cero es una buena noticia porque queremos crecer pero debemos jugar mucho mejor”.
Pablo Fornals jugó en banda derecha y Míchel comentó el porqué de tomar esa decisión: “Entendíamos que iba a ser un duelo de mucho centro del campo, mucha segunda jugada y de tener la posesión del balón. Creíamos que Pablo ahí podía meterse por dentro y darle profundidad a Rosales. En la primera parte fue imposible porque no teníamos el balón pero en la segunda se ha visto mejor. Hemos tenido que hacer cambios porque el Chory y Sandro estaban mal físicamente”.
El Málaga ha conseguido dejar la portería a cero después de varias jornadas sin conseguirlo: “Dejar la portería a cero era una de las situaciones que se marcaban mucho. En esta situación, la inseguridad de que siempre recibes un gol marca mucho los partidos. Ya saben que pueden defender bien. El Leganés no es un rival fácil, tenemos un equipo enfrente que ha mejorado muchísimo en los últimos meses. Hacen muy bien lo que creen, en los últimos dos meses muy pocos equipos les han domado, y menos aquí”, dijo el madrileño.
Ya son diez días los que lleva Míchel al frente del equipo y habló sobre su relación con los jugadores y el cuerpo técnico: “Ya nos conocemos, llevamos diez días trabajando juntos. No es mucho pero no es una excusa. Ellos saben lo que queremos, queremos darle esa confianza y esa seguridad para que vean que lo pueden hacer. Hace diez días estaba viendo estos partidos en el sillón de mi casa y espero no volver”.