La pérdida de importancia del "10" amarillo

El número 10 del Villarreal ha quedado sin dueño tras la marcha de Alexandre Pato al Tianjin Quanjian. Desde que Cani dejó el Submarino, el número ha cambiado tres veces de manos, pero ninguno de esos jugadores duró mucho tiempo.

La pérdida de importancia del "10" amarillo
Imagen: Juan Ignacio Lechuga (VAVEL.com)
natreyda
Por Daniel Bernat

Tradicionalmente, si preguntabas a los entendidos del mundo del fútbol, o simplemente a los aficionados, qué jugador de su equipo era el más destacado, o los más importantes, casi con total seguridad señalarían el que portara el dorsal número 10 como uno de los principales baluartes de la plantilla en cuestión. En el Villarreal, desde 2006 hasta 2014, el jugador que llevó esa camiseta fue Rubén Gracia Calmache, más conocido como Cani, un hombre que jugó un total de 222 partidos con el conjunto amarillo, siendo a día de hoy uno de los futbolistas con más partidos en la disciplina del equipo de La Plana; antes que él lo vistieron Roger, Víctor Fernández o Cagna, entre otros. Desde que el aragonés finalizara su vinculación con el Submarino, el "10" ha cambiado de manos hasta en tres ocasiones, y ninguno de los jugadores que lo llevaron continúa en el Villarreal.

Joel Campbell: media temporada sin terminar de cuajar

Campbell, celebrando su gol frente al Elche | Foto: Mª José Segovia (VAVEL.com)
Campbell, celebrando su gol frente al Elche | Foto: Mª José Segovia (VAVEL.com)

La marcha repentina de Cani en el mercado invernal de la temporada 2014/2015 propició la necesidad del Villarreal de buscar un hombre que supliera la baja del jugador aragonés, y el elegido fue Joel Campbell, que llegó procedente del Arsenal inglés, a préstamo hasta el final de campaña.

El centrocampista no fue uno de los principales protagonistas de la segunda mitad de temporada en el Villarreal, pese a participar en un total de 22 encuentros en los seis meses que pasó en Vila-real. No obstante, en ese total de partidos jugados, solo consiguió marcar un gol (contra el Elche) bajo el mando de Marcelino García Toral. Pese a las oportunidades de las que gozó, nunca terminó de cuajar en el club amarillo, y a final de curso regresó a Londres.

Leo Baptistao: temporada marcada por la irregularidad

Baptistao, en un lance de juego frente a Las Palmas | Imagen: Mª José Segovia (VAVEL.com)
Baptistao, en un lance de juego frente a Las Palmas | Imagen: Mª José Segovia (VAVEL.com)

En la 2015/2016, el Villarreal llevó a cabo una revolución en su delantera, ya que llegaron a la ciudad Roberto Soldado, Cedric Bakambu, Adrián López y Leo Baptistao, sustituyendo a Uche, Vietto, Gerard Moreno y Giovani dos Santos, que dejaron la plantilla amarilla. El brasileño fue el elegido para portar el "10", en busca de minutos y oportunidades que le devolvieran al nivel mostrado en épocas anteriores, como por ejemplo en sus años en el Rayo.

No obstante, ante las diferentes lesiones que padeció a lo largo de la temporada, y la dupla Soldado-Bakambu, el ariete cedido por el Atlético de Madrid tuvo un papel más secundario en el equipo. En un total de 34 partidos jugados entre todas las competiciones, consiguió anotar seis goles, repartidos de la siguiente manera: tres en Liga BBVA, uno en Copa del Rey, y dos más en Europa League. En mayo de 2016, regresó a la capital madrileña para ser vendido posteriormente al Espanyol, club en el que milita en la actualidad.

Alexandre Pato: gran inversión económica con un rendimiento por debajo de lo esperado

Pato, en una jugada frente al Alavés | Imagen: Silvestre Szpylma (VAVEL.com)
Pato, en una jugada frente al Alavés | Imagen: Silvestre Szpylma (VAVEL.com)

Una vez más, el "10" quedaba vacío de dueño y este verano se le buscó un nuevo propietario, que además tenía el caché suficiente como para llevarlo, pese a que no se encontraba en su mejor nivel, tras varios años en el ostracismo brasileño: Alexandre Pato. El jugador llegaba en verano a Vila-real tras una operación bastante asequible para el conjunto de La Plana (rondó los 1,7 millones de euros), con la esperanza de revivir futbolísticamente hablando, como hicieran otros jugadores en el pasado que vistieron la elástica amarilla, como Sonny Anderson o Diego Forlán.

Pero el paso de los meses, lo que iba mostrando es que Pato no encontraba su sitio en el equipo amarillo, pese a jugar bastantes partidos en esta primera mitad de temporada. En 24 partidos, ha marcado un total de seis goles, que le otorgan un privilegio que estaba a disposición hasta el momento de José Mari: anotar en cuatro competiciones en una misma temporada con el Villarreal.

Pese a estos datos y un atisbo de recuperación del mejor nivel del brasileño, la oportunidad económica que se presentaba desde China, unido a la falta de rendimiento del delantero y del equipo en general, provocó que los máximos responsables del club sopesaran la posibilidad de renovar la delantera del equipo en este mercado invernal. La marcha de Pato se oficializó ayer, el último día de mercado, por lo que el número 10 se volvió a quedar huérfano, pero no las arcas amarillas, que han recibido por su traspaso una cifra cercana a las 18 millones de euros.

Tras tener tres dueños en apenas dos años, el Villarreal no ha sido capaz de encontrar un sustituto de este número tan relevante en la historia del fútbol, y que en la entidad amarilla parece haber perdido peso. Habrá que esperar hasta el próximo verano para ver quién viste la elástica del Villarreal con el 10 a sus espaldas, y si dura más que sus predecesores.