Nicola Sansone ha ido perdiendo fuelle con el paso del tiempo. El italiano, que fue uno de los fichajes más destacados el pasado verano en el Villarreal, comenzó la temporada muy bien, siendo uno de los referentes del Submarino ante las ausencias de Soldado y Bakambu, y devolviendo las titularidades con goles. En los diez primeros partidos de LaLiga Santander, logró marcar cinco goles, convirtiéndose en el pichichi de los de Escribá, y una de las sensaciones del comienzo liguero en nuestro país, con golazos como el realizado ante la Real Sociedad en El Madrigal, desde casi el medio del campo, y dando alas a un Villarreal que vivía un excelente estado de forma, que se reflejaba en la obtención de buenos resultados. Pero a partir de ese momento, el "18" amarillo no recuperó ese nivel.

El quinto tanto de Sansone lo obtuvo en octubre ante Las Palmas, de penalti, gol que servía para empatar el encuentro, para que posteriormente Bakambu rematara la faena para dar los tres puntos a los amarillos. Eso sucedió el 23 de ese mismo mes, y hasta el último duelo de la fase de grupos de la Europa League del Villarreal (en diciembre) no marcaría nuevamente en un partido oficial con su equipo. Abrió la lata ante el Steaua de Bucarest, partido que concluyó 2-1 para los de Escribá, y que supuso el pase a la siguiente ronda de la competición europea. En la última jornada del año, en la visita al Sporting, Sansone logró su sexto tanto liguero, y marcaría nuevamente en el siguiente compromiso amarillo, ya en 2017.

Y precisamente fue en un duelo de altura, ante el Fútbol Club Barcelona, que para colmo, fue el duelo que inauguró la nueva denominación del estadio del Villarreal, Estadio de la Cerámica, y estuvo a punto de ser el gol de la victoria, ya que los de Luis Enrique empataron en las postrimerías del encuentro, gracias a un golazo de Messi de falta directa. Ahí terminó la aportación de Sansone con el Villarreal en lo que llevamos de año, porque desde aquel 8 de enero no ha vuelto a marcar.

No anotó en las eliminatorias que disputó su equipo en Copa del Rey (frente a Toledo y Real Sociedad), ni tampoco en dieciseisavos de final ante la Roma, en el mes de febrero. La llegada de Adrián en enero, unido al retorno de Bakambu y la recuperación de Soldado el mes siguiente, apartaron un poco al italiano, que no dio muchos motivos a Escribá para contar con él como titular, dado que seguía sin ver puerta, y el estado de forma en el que volvió el delantero valenciano, unido a su sincronía con el congoleño, dejaba pocas dudas al preparador del Submarino. Tampoco está ayudando el gran esprint final del ariete africano, provocando que prácticamente todas las jornadas parta como titular en las alineaciones del míster amarillo.

Desde luego, los motivos del bajón del italiano no estarán relacionados con la falta de minutos, dado que es el octavo jugador de la plantilla con más minutos disputados en liga (2.109), y el primer delantero con más tiempo jugado en esta temporada, si bien es cierto que buena parte de esos minutos los jugó en el primer tramo de campaña, cuando era él la principal referencia ofensiva. En muchas ocasiones, Escribá ha recurrido a Sansone como revulsivo, o un intento al menos, ubicándolo en banda, por detrás de los dos puntas, y no ha aportado absolutamente nada cuando ha jugado en esa posición.

El Villarreal sigue en la pelea por Europa, en buena parte, por la gran renta que arrastra de la primera vuelta, y por los buenos momentos de forma de Soldado, Bakambu y Soriano, junto al gran trabajo defensivo, y Sansone ha quedado relegado a un segundo plano, al no aportar goles desde hace más de cuatro meses. Si el próximo domingo no juega, o sí que lo hace y no marca, prolongará una jornada más su racha negativa de cara a puerta, cerrando la temporada con unas estadísticas bastante más pobres de lo que parecía que iba a dejar cuando arrancó el curso.