Un nuevo viaje por el viejo continente está más caro que nunca. La Liga puede dar buena fe de ello. Tras los incombustibles Barça y Valencia, Real Madrid, Atlético y Sevilla intentan seguir su estela, para lograr la clasificación para disputar Champions League la próxima temporada. Inmediatamente por detrás del equipo hispalense, se encuentra el Villarreal de Javi Calleja, que actualmente obtendría un billete para jugar nuevamente la UEFA Europa League la próxima campaña 2018-2019. Sin embargo, aún queda mucha competición y obstáculos que superar.
El siguiente escollo del Submarino Amarillo será el Celta de Vigo. Después de encadenar cuatro derrotas consecutivas (tres en Liga y una en Europa), los amarillos buscarán romper la mala racha en Balaídos y conseguir tres puntos importantísimos de cara al objetivo, que no es otro que lograr una nueva clasificación para Europa League. El conjunto entrenado por Unzué, actualmente undécimo en la tabla con 18 puntos, se encuentra a solo tres del Villarreal, que marca la zona europea, lo que muestra la importancia y trascendencia del partido de mañana.
Con la llegada de Javier Calleja, el combinado castellonense mejoró en gran parte, convirtiéndose en un conjunto que practica un fútbol más atractivo, vistoso y ofensivo, pero dejando mayores facilidades atrás. Pese a los buenos partidos que encadenó el equipo amarillo, la derrota por 2-3, sufrida ante el Sevilla, fue el principio del bache de resultados que azota a este nuevo Villarreal. El Submarino se puso 2-0 en 60 minutos, pero el ímpetu sevillista dio el triunfo a los visitantes. Las derrotas ante Leganés (3-1) en Liga y frente al Maccabi (0-1) en Europa, se unieron a la más reciente, sufrida en casa ante el líder Barça (0-2), dejando al equipo levantino muy tocado justo antes del parón navideño.
Durante las tres jornadas ligueras en las que los amarillos no lograron sumar ni un solo punto, manteniendo la suma de 21 unidades, un gran número de equipos de La Liga han ido escalando posiciones en la clasificación, creando una enorme igualdad en la lucha por la mitad de tabla y las posiciones europeas. Sorprendentemente, entre el 13º de la tabla, el Eibar, y el actual equipo que marca los puestos de Europa League, el Villarreal, solo hay tres puntos. Todo lo contrario encontramos en la zona alta, donde siete puntos separan al Sevilla (5º) y al Submarino (6º), lo que ha distanciado mucho a los amarillos de la zona Champions. En otras palabras, los de Calleja deben mirar por el retrovisor, en lugar de por el catalejo.
La actual disposición de la clasificación liguera nos deja otro insólito dato. Con 15 jornadas disputadas, y la primera vuelta encarrilando su final, hasta el colista se encuentra a una distancia remontable de las posiciones de Europa League. Los conjuntos que ocupan la zona de descenso, Alavés, Málaga y UD Las Palmas (en orden descendente), están a 9, 10 y 11 puntos respectivamente de la sexta posición. Más arriba, conjuntos como el Deportivo, el Espanyol, el Levante y el Athletic Club se encuentran a distancias de entre cuatro y seis unidades del Villarreal. Básicamente, proseguir la mala dinámica durante los dos siguientes partidos (con los que finaliza el año 2017) podría provocar un descenso de los amarillos hacia la parte media - baja de la clasificación. Alerta.
Por el momento, el equipo capitaneado por Mario Gaspar (ante la baja de Bruno Soriano) debe concentrarse en ganar el encuentro de mañana en Balaídos, vital para mantener la sexta plaza por, al menos, una jornada más. De lo contrario, el equipo celeste podría empatar a puntos al cuadro amarillo y ponerle en un serio problema de cara a la jornada siguiente, en la cual se medirá al Valencia en Mestalla. Otros perseguidores, como Leganés, Getafe o Girona, empatados a 20 puntos, podrían superar al Villarreal en la clasificación, en caso de pinchazo mañana. Mientras, la Real Sociedad continuará por detrás de los amarillos, al haber empatado ante el Athletic (0-0).