Hipatia: la voz de la sabiduría
Mujeres científicas: Hipatia de Alejandría. Pinterest

Esta adelantada a su tiempo fue una astrónoma, matemática y filósofa que vivió en la ciudad egipcia de Alejandría entre los siglos IV y V d. C. Durante su vida, llevó a cabo una serie de proezas que no han sido reconocidas lo suficiente.

El motivo fundamental reside en que, desde un principio, su brutal asesinato generó un terrible impacto en la sociedad. Un grupo de fanáticos cristianos, dirigidos por Cirilo, obispo de Alejandría fueron los encargados de cometer el homicidio.

Inició su andadura en el ámbito científico gracias a la educación que trató de inculcarle su padre, Teón de Alejandría, célebre matemático y astrónomo griego. Con esta sólida base, Hipatia continuó su formación en las ciudades más prestigiosas a nivel cultural de la época, como Atenas y Roma. Tras regresar a su ciudad natal, se adentró en el mundo de la docencia y comenzó a impartir clases de matemáticas, astronomía, filosofía, mecánica, etc., sus mayores especialidades.

En sus clases no se permitía la presencia de mujeres ni de personas pertenecientes a los estratos sociales más bajos, por lo que sus enseñanzas se dirigían a las familias ricas y poderosas de Alejandría y otras ciudades, tanto de Oriente como de Occidente.

Posteriormente, heredó la alejandrina escuela platónica, donde destacaba la enseñanza de la doctrina platónica renovada por el filósofo griego Plotino. Esta recibe el nombre de neoplatonismo. Aquí, explicaba las ciencias filosóficas a todas aquellas personas que lo desearan. A su vez, obtuvo, gracias a su formidable trayectoria, la dirección del Museo de Alejandría, en un mundo masculino que dejaba pocas oportunidades a la formación de las mujeres.

Esta verdadera experta escribió 44 libros, como el comentario en trece volúmenes de la Aritmética de Diofanto y el de ocho volúmenes de las Cónicas del geómetra Apolonio. Asimismo, colaboró en la invención del astrolabio y el aerómetro.

Un terrible asesinato puso fin a la vida de esta memorable mujer que contribuyó enormemente a la sabiduría de la época previa al comienzo de la Edad Media. La causa principal fue su discrepancia con el cristianismo, religión única del Imperio romano implantada por Teodosio I. Hipatia era pagana, razón por la que comenzó su calvario. Además, su forma de vida, la de una fémina independiente y cultivada, se encontraba en total contradicción con el ideal de mujer cristiana del momento.

Todo ocurrió en el año 415 d.C., cuando un conjunto de cristianos eufóricos, al mando del obispo Cirilo, acorralaron a Hipatia, quien fue desnudada, vejada y torturada hasta morir despellejada, ya que una banda de impresentables arrancó sus carnes con conchas marinas. Finalmente, sus restos fueron quemados.

Esta verdadera atrocidad impactó tanto al pueblo alejandrino que una gran multitud se dirigió hacia la famosa Biblioteca, tesoro cultural y científico de la antigüedad, y la incendiaron. La tragedia supuso la pérdida de una gran cantidad de obras literarias y científicas que las llamas se llevaron consigo, lo que supuso un verdadero estancamiento en la evolución de la humanidad.

La Gran Biblioteca de Alejandría : Wikicommons
La Gran Biblioteca de Alejandría : Wikicommons

Se trata de uno de los ejemplos que manifiesta que las mujeres no han sido ajenas al desarrollo de la ciencia, sino que más bien han sido infravaloradas, apartadas de un mundo que no las veía capacitadas para entenderlo.

Por lo tanto, puede afirmarse que sí que han existido mujeres dedicadas al desarrollo y divulgación de los conocimientos científicos durante el transcurso de la historia, pero es necesario darles voz, tenerlas en cuenta y destapar sus múltiples hazañas ocultas tras la imponente figura masculina históricamente vinculada a la investigación.

Mileva Maric, matemática y primera esposa del célebre físico alemán, Albert Einstein ratificó, a través de las siguientes declaraciones, la marginación del género femenino en la ciencia:

Hace poco hemos terminado un trabajo muy importante que hará mundialmente famoso a mi marido”, Mileva Maric.

FUENTES

-Costas, E., & López, V, & Pintor, J. PURASANGRES Y CERDOS. EL PLACER DE PENSAR Y OTROS ENSAYOS CIENTÍFICOS. Maza, A. R., & Leite, E. (Editores). Silente Académica.

-Cuervo, B. Hypatia de Alejandría. Recuperado de  http://www.monografias.com/trabajos92/hypatia-alejandria/hypatia-alejandria.shtml

–Escultura de Howard Roberts (1843/1900) [Imagen]. Recuperado de https://losmundosdebrana.wordpress.com/2013/04/02/hipatia/

-Muñoz-Páez, A. (1996). Historia y epistemología de las ciencias. Algunas contribuciones de la mujer a las ciencias experimentales [archivo PDF]. Recuperado de http://www.raco.cat/index.php/Ensenanza/article/view/21452/93416

-National Geographic. (2015, Noviembre, 15). Hipatia, la científica de Alejandría. National Geographic. Recuperado de http://www.nationalgeographic.com.es/historia/grandes-reportajes/hipatia-la-cientifica-de-alejandria-2_9797

-Otero, L. La historia de Hipatia de Alejandría. Muy Historia. Recuperado de http://www.muyhistoria.es/h-antigua/articulo/hipatia-de-alejandria

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