Las dinastías son siempre difíciles de catalogar, en muchos casos, los años entre los diferentes títulos o grandes actuaciones no van parejas. En el caso actual de Los Angeles Kings, las tres últimas temporadas han sido gloriosas para la franquicia, llegando (y ganando) a dos finales de la Stanley Cup y una final de conferencia en la cual cayeron ante los Chicago Blackhawks, el otro gran conjunto del momento.

Desde comienzos del siglo XXI, la NHL se ha carectarizado por la igualdad entre sus franquicias y el reparto de los campeonatos entre muchas de ellas. A diferencia de épocas anteriores donde algunos equipos se hacían con varios campeonatos seguidos, sea el caso de los Montreal Canadiens, New York Islanders o Edmonton Oilers por ejemplo, actualmente la sequía de Stanley Cups al hilo cumplió 16 años, siendo los Detroit Red Wings los últimos en conseguirlo.

Tres franquicias serían las candidatas a ser consideradas la primera dinastía del siglo XXI, Detroit, Chicago y Los Angeles. En el caso de los de Michigan, entre las campañas 1994/95 y 2008/09 acumularon 4 Stanley Cups y 2 sub-campeonatos, 6 títulos de conferencia y dos presencias más en la final del Oeste. Grandes números acompañados por la friolera cifra de 23 apariciones en los playoffs consecutivamente, aún en vigor. Sin ninguna duda, Detroit sería por palmarés el mejor de los tres candidatos pero la mitad de este fue conseguido durante el siglo pasado, dejando el honor de dinastía “pura” de principios del actual siglo a algunas de las otras franquicias, si es que pueden considerarse tales.

Chicago, después de unos años muy oscuros, está atravesando uno de sus mejores periodos, viendo cómo en últimas 6 campañas ha ganado 2 Stanley Cups, además de llegar a dos finales más de conferencia. Esta temporada estuvo cerca de repetir campeonato pero L.A. lo evitó. Si la calidad de su plantilla continúa rindiendo al máximo nivel, Los Hawks tendrían muchos números para ir sumando títulos y buenas actuaciones, mereciendo el sobre nombre de dinastía con honores, algo aún muy temprano para catalogarlo así.

Los Kings, actuales campeones, son los que más posibilidades tienen de llevarse tal galardón honorífico viendo la excelente plantilla que poseen, augurando un gran futuro inmediato. Al igual que los de Illinois, también es muy precipitado para catalogarles de dinastía pero el camino está iniciado y parece firme.