La NFC sur será un año más trepidante. Los Buccaneers decepcionaron la temporada pasada, pero en cambio, Falcons, Saints y Panthers mostraron un nivel muy destacable. Los Saints, gracias a un draft espectacular en 2017, crecieron hasta llegar a ser candidatos al título, mientras que los Falcons, tras el grave revés de la Super Bowl LI ante los Patriots, se quedaron a las puertas de repetir la final. Este es un análisis del draft de este año de ambos equipos para comprobar si ofrecerán un nivel similar o no para esta temporada.
Atlanta Falcons
1. Clavin Ridley, receptor.
2. Isaiah Oliver, cornerback.
3. Deadrin Senat, defensive tackle.
4. Ito Smith, runningback.
5. Rusell Gage, receptor.
6. Foyesade Olokun, linebacker.
Con la marcha de Dontari Poe (y encima un rival divisional, los Carolina Panthers), los Falcons debían elegir en el draft a un defensive tackle que lo supliera. Deadrin Senat fue el escogido… pero en tercera ronda. Atlanta decidió centrarse en otras posiciones (más bien en aprovechar grandes talentos que todavía no habían sido elegidos), sorprendiendo de este modo que dejaran al defensive tackle hasta tan tarde. Senat tendrá un papelón.
En su lugar, la elección de un receptor en la primera ronda realmente tiene mucho sentido. Taylor Gabriel se fue a los Chicago Bears, y por ello, los Falcons querían a un jugador de características similares. Calvin Ridley tiene un talento enorme y podría haber sido cogido bastante antes. Los Falcons no desperdiciaron la oportunidad y se hicieron con él. Si a ello le sumamos los rumores de que las relaciones entre el equipo y Julio Jones no pasan por el mejor momento, es posible que Atlanta haya proyectado un posible futuro sin el receptor estrella.
Por el resto, remarcar que al segunda ronda Isaiah Oliver le pasa algo parecido que a Ridley: un gran jugador que los Falcons no quisieron desaprovechar. Pero es destacable la elección de Ito Smith, un corredor que estaba proyectado para las últimas rondas del draft y que Atlanta vio en él algo para que lo escogieran en la cuarta. El juego terrestre, de este modo, queda reforzado, pero la figura de un fullback y la de un hombre de la línea ofensiva hubiesen ayudado mucho a la plantilla. Las dos últimas elecciones ni siquiera fueron para ello.
New Orleans Saints
1. Marcus Davenport, defensive end.
2. Tre’Quan Smith, receptor.
3. Rick Leonard, offensive tackle.
4. Natrell Jamerson, cornerback.
5. Kamrin Moore, cornerback.
6. Boston Scott, runningback.
7. Will Clapp, offensive line.
Marcus Davenport tiene que responder sobre el terreno de juego porque ya está en deuda con los Saints. New Orleans escaló posiciones en la primera ronda para escogerlo a él, renunciando a la primera ronda del draft de 2019. Un movimiento muy agresivo que demuestra la voluntad de hacerse con el defensive end sí o sí. Obvia decir la calidad y el talento de este jugador. Ahora le toca demostrarlo en el campo.
Los Saints son un equipo con pocas lagunas, por lo que el draft iba a servir más para complementar que otra cosa. Puestos a complementar, extraña que hayan escogido no uno sino dos cornerbacks, una posición de sobras cubierta con el draft de 2017 y que no necesitaba ningún refuerzo. Algo parecido con la posición de receptor tras elegir a Tre’Quan Smith en segunda ronda.
Por lo que respecta al quarterback, una posición en la cual el equipo deberá pensar más pronto que tarde teniendo en cuenta la edad de Drew Brees, los Saints optaron por no elegir a ninguno. Es verdad que recientemente han firmado a J.T. Barret, un quarterback de Ohio State, y que tiene a otros hombres como Tom Savage y Taysom Hill para competir por la segunda posición, pero por el momento, declinan la opción de un joven rookie prometedor del draft.
Finalmente, remarcar el refuerzo en la línea ofensiva tras la marcha del que fuera sexto hombre en dicha línea, Senio Kelemete. Rick Leonard y Will Clapp han sido los escogidos. Como está dicho, los Saints eran y son, antes del draft, un equipo muy completo. Una vez escogidos sus nuevos rookies, todos los focos se centrarán en Davenport.