El encuentro entre España y los Países Bajos se anunciaba apasionante. Ambas selecciones habían ganado claramente a los otros dos rivales del grupo, China Taipei y México, con una mínima mayor contundencia para los orange.

España partía como inferior en el encuentro decisivo, el nivel de sus clubes y de equipos nacionales es inferior en ranking, pero el equipo de los Países Bajos no contaba con sus mejores jugadores. Los jugadores neerlandeses, curtidos en las distintas divisiones de la liga alemana, son fuertes y duros en el choque en las vallas. Iba a ser un partido que iba a obligar a un esfuerzo muy alto a nuestros jugadores, en su mayoría acostumbrados a una liga menos física como es la LNHH.

Empezó el primer periodo y, salvo alguna duda inicial, los jugadores españoles demostraron que no se iban a achantar en la guerra de guerrillas de las vallas. Bruno Baldris, Alfon García y Adrian Ubieto plantaban cara en las esquinas a ambos lados de un enorme Ander Alcaine, que impresionaba que nadie iba a poder marcarle esa noche. Mientras en ataque, pese al gran esfuerzo de los nuestros, naufragábamos chocando constantemente con su defensa, ni siquiera se les pudo encajonar en el powerplay del que se dispuso. Solo dos tiros de Luis Giménez y Alfon García pusieron el “casi” en la garganta de los aficionados.

Entonces llegó el accidente de la máquina pulidora del hielo, que causó una grieta importante junto a uno de los puntos de faceoff y que dejaba una superficie donde el puck se frenaba al pasar y ocasionaba riesgo de deslizamiento y caídas para los jugadores. Pese a los esfuerzos por cerrar la grieta, el encuentro tuvo que ser suspendido pasadas las once de la noche y, tras las conversaciones mantenidas, la RFEDH informó que la reanudación del mismo tendrá lugar en enero (fecha por determinar) en la misma pista.

Hasta entonces el torneo había sido casi perfecto para nuestros jugadores que se deshicieron sin problemas de China Taipei, en un encuentro muy limpio donde 11 jugadores distintos marcaron para el 11-1 final, y de México.

En el partido ante el equipo mejicano se vivieron más momentos de tensión, provocados por los jugadores americanos que quizá pretendían endurecer y sacar de sitio a los nuestros.  Consecuencia de ello fue la sanción a Alejandro Carbonell de 25 minutos, que le dejaba sin encuentro ante los Países Bajos, por un gesto que los árbitros interpretaron como intento de agresión con la cabeza a un rival. Cuando los mejicanos se cansaron llegó el festival que alcanzó hasta el 15-1, con cinco goles en los últimos cinco minutos. Destacaron los jugadores del SAD Majadahonda con tres goles de Luis Hernández, dos goles y cuatro asistencias de Alfon García, y repartiéndose entre los otros tres jugadores de campo de este club otro gol y tres asistencias, además de contar con minutos en la portería Nacho García y su canterano Raúl Barbo.

Un gran torneo para España que finalizará en enero y, con solo dos periodos por disputar y partiendo de un 0-0, nuestros jugadores tienen opciones de pasar el envite. De pasar a la tercera ronda nos esperaría el grupo G, a jugarse en Jesenice (Eslovenia) a primeros de febrero, contra Japón, Lituania y Eslovenia.

Fuente de fotografías: web IIHF