Se sabe que en el tenis uno tiene muchas dificultades a la hora de competir, entre ellas, la principal amenaza que en muchos casos aparece sin avisar, es la lesión. Y más precisamente eso le ocurrió a Stan Wawrinka en la temporada pasada, cuando debió abandonar las pistas tras sufrir en primera ronda de Wimbledon un fuerte dolor en la rodilla izquierda. Tras someterse a varias cirugías y volver recién en enero de este año a jugar, el suizo de a poco parece retomar confianza en sí mismo.

El día de hoy le tocó un rival duro de roer. Karen Khachanov, le planteó un partido muy parejo desde el fondo de la cancha. El primer quiebre a favor del suizo se produjo en el cuarto game. De esta manera, el ex top-ten confirmó esa ruptura en el servicio y pasó a estar 4-1. Pero no le resultó nada sencillo cerrar la manga y de estar 5-3 con su saque, el ruso dio vuelta el score para ponerse 6-5. Finalmente, con un buen porcentaje de primeros servicios, Wawrinka selló el set 7-6(10).

Si bien el saque de Stan es un factor clave en su juego agresivo, quien más aprovechó esa cualidad fue Khachanov, ya que tuvo 12 aces contra seis del suizo. El segundo set se dio de manera similar, definiéndose en tie-break, pero a diferencia de que en este caso no hubo ninguna ruptura de servicio. No obstante, en el comienzo del desempate, Stan mostró toda su jerarquía y se impuso 5-0. El joven de 22 años nada pudo hacer, sólo un punto, y finalmente el suizo selló el tie-break 7-1.

Ahora le queda esperar, y ver qué jugador le llega a tocar en los cuartos de final. Entre ellos puede medirse ante el argentino Guido Pella, o el campeón defensor del título, Damir Dzumhur.