La jornada de miércoles supuso el cierre de los cuartos de final en el Open de Australia. Con la acción llegando a su fin en Melbourne Park, quedan escasas horas para conocer quiénes pugnarán por alzarse con el primer Grand Slam de la temporada.
Kei Nishikori se retira ante Novak Djokovic
El último turno del día en Melbourne dejaba, casi con total seguridad, el duelo más atractivo en estos cuartos de final. Dos clásicos como Novak Djokovic y Kei Nishikori ocuparían la Rod Laver Arena en el que sería el 18º cara a cara entre ambos. Con un bagaje de 15-2 claramente favorable al serbio, el japonés buscaría repetir lo logrado en el US Open de 2014, cuando el de Shimane apartó al de Belgrado de la final neoyorquina.
Sin embargo, las cosas no salieron como estaba previsto. Tras su batalla maratoniana, y polémica, ante Pablo Carreño-Busta un día antes, Kei Nishikori dio evidentes muestras de cansancio y cedió la primera manga por 6-1. Djokovic, que venía de recibir sendos sustos ante dos jugadores jóvenes como Shapovalov y Medvedev, capaces ambos de arañarle un set al número uno mundial, jamás se vio incomodado por un Nishikori que pidió tiempo muerto médico al concluir el primer asalto. Vendado en el cuádriceps derecho, el asiático solo aguantaría cinco juegos en la segunda manga, viéndose forzado a retirarse cuando caía por 4-1.
Tras este agridulce "triunfo", Novak Djokovic llegará descansado a sus séptimas semifinales en el Open de Australia, ronda en la que nunca ha caído en Melbourne Park. Allí se las verá con un debutante en estas instancias, el francés Lucas Pouille, verdugo de Milos Raonic.
Lucas Pouille se mete en sus primeras semifinales de Grand Slam
Torneo para recordar el que está realizando Lucas Pouille. El galo, muy lejos de su nivel durante todo el 2018, ha parecido olvidar todos sus problemas. Dispuesto a empezar de cero, y recuperar todo lo que perdió la pasada campaña, Pouille se ha plantado en sus primeras semifinales de Grand Slam tras batir a todo un peso pesado como Milos Raonic, que se postulaba como la principal amenaza de Djokovic en esta parte alta del cuadro.
El canadiense, claro favorito en este cruce de cuartos de final, no logró contener el nivel excelso del europeo, que se puso por delante gracias a un marcador favorable de 7-6 y 6-3. Con todo encarrilado, Pouille no liquidó el partido en el tercer parcial, que se anotaría Raonic en otro tie-break. Finalmente, y superadas las tres horas de partido, el de Grande-Synthe hacía historia y, por 6-4, se apuntaba la definitiva cuarta manga, que daba a Lucas acceso a sus primeras semifinales en un major.
El 28º cabeza de lista, tutelado por la gran Amelie Mauresmo, a la que Pouille dedicó numerosos elogios, se convierte así en el primer francés que alcanza esta ronda en Australia desde que Jo-Wilfried Tsonga lo lograse en 2010. Con el objetivo más que cumplido, y más sabiendo que el francés jamás había ganado un partido en el cemento oceánico en sus cinco participaciones previas, Pouille se medirá por un puesto en la final con el seis veces campeón: Novak Djokovic.
Karolina Pliskova sorprende a Serena Williams
La lucha por el número uno de la WTA está muy viva. La derrota de Simona Halep ante Serena Williams en los octavos de final, hizo que la rumana dejase vacante el centro del tenis femenino mundial. Sin embargo, todavía no se conoce a la que será su sucesora. Una de las candidatas es Karolina Pliskova, número ocho del ranking y una vez finalista de Grand Slam. La checa, que alcanzaba los cuartos de final en Australia por tercer año consecutivo, se enfrentaría, precisamente, al detonante de esta guerra: Serena Williams.
Un prematuro break a favor de Pliskova, en el tercer juego del partido, fue ventaja suficiente para la europea, que no cedió terreno y se anotó el primer set por 6-4. Mismo resultado, pero a la inversa, en la segunda manga; Serena, que tuvo que remontar una situación adversa, rompió el saque de Pliskova hasta en dos ocasiones para mandar el partido al decisivo tercer parcial, un parcial surrealista.
El partido parecía estar muy de cara, prácticamente decidido, en favor de una Serena Williams que llegó a estar con ventaja de 5-1. A partir de ahí, todo se convirtió en un infierno para la estadounidense, que desaprovecharía hasta cuatro bolas de partido y dos roturas de ventaja en favor de una Pliskova capaz de romper el saque de la 23 veces campeona de Grand Slam hasta en tres ocasiones para, con 5-6, amortizar su servicio y certificar su triunfo por 6-4, 4-6 y 7-5 en algo más de dos horas.
Naomi Osaka sigue de dulce
La japonesa Naomi Osaka no dio pie a tanta sorpresa en su cruce de cuartos de final con la ucraniana Elina Svitolina. La número cuatro mundial y campeona en 2018 del US Open, firmó por la vía rápida la clasificación a sus primeras semifinales en el Open de Australia, donde nunca había pasado de cuarta ronda. 6-4 y 6-1 en algo más de una hora en un partido que se podría haber complicado en un primer set que finalizó con un baile de roturas, dos para Svitolina y tres para Osaka.
Una vez concluido ese ir y venir de rupturas, la segunda manga no tuvo historia, y es que dos break seguidos para la nipona, que se vio con un contundente 5-0 a favor, enterraron las opciones de una Svitolina mermada mentalmente por lo sucedido en la primera manga. Con todo, Naomi Osaka buscará, con solo 21 años, su segunda final de Grand Slam seguida.