Tras conmocionar al mundo del tenis anunciando su inminente retirada en la previa del Open del Australia, Andy Murray se ha sometido a una segunda operación en su maltrecha cadera derecha. El tenista escocés así lo anunció hoy mismo tras colgar un par de fotos en sus redes sociales, una en la que se le ve posando en la cama de lo que parece ser una habitación de hospital de Londres, y la otra, de una radiografía de cómo va a quedar ahora su cadera, que ha sido reemplazada por una prótesis de metal con la que espera estar libre de dolor de manera definitiva. 

El propio Murray acompañó estas dos fotos con el siguiente texto en el que confirmaba que la operación había salido bien. "Acabo de someterme a una operación de artroplastia de cadera en Londres este lunes por la mañana. La sentía maltrecha y amoratada hasta ahora pero espero que este sea el final de mis dolores de cadera. Ahora tengo una prótesis de metal que podéis ver en la segunda foto y también notaréis como tengo un poco de barriga en la primera foto", comentó Murray, el cual nunca pierde el sentido del humor pese al duro calvario que ha estado sufriendo en los últimos dos años. 

Se trata de la segunda operación a la que se somete el británico con el intento de paliar los constantes dolores que viene padeciendo en esa zona del cuerpo desde julio de 2017 y que no le han dejado volver a su mejor nivel. Hace exactamente un año, ya fue operado por primera vez en Melbourne, poco antes del inicio del Open de Australia. Pese a que en aquel momento, el escocés no dudaba de que volvería a competir al máximo, pronto se demostró que la operación no había solucionado en nada el problema. Murray volvió en el torneo de Queen´s, once meses después de disputar su último partido oficial en Wimbledon

Tras ello, un fugaz regreso en el que no fue capaz de alternar dos torneos consecutivos hasta poner punto y final a la temporada a finales de septiembre. Con esta decisión, Murray quiso darse más tiempo para preparar el 2019 en plenitud de garantías, pero en cuanto volvió a los entrenos durante la pretemporada, vio claro que nada había cambiado, desembocando todo en su emotiva rueda de prensa el pasado 11 de enero en la que anunciaba su intención de retirarse este año. 

Ahora, el de Dunblane deberá esperar a ver cómo se recupera, si consigue hacerlo, y tomar una decisión: intentarlo de nuevo o colgar la raqueta de manera definitiva.