Llegó para quedarse, el tenis agradecido. Pocos la tenían fichada. Era prácticamente desconocida. Paso a paso fue ganando partidos y llamando la atención. Había eliminado sin atenuantes a la rumana Simona Halep, segunda del ranking mundial, en uno de los primeros batacazos del torneo parisino.

De enorme personalidad y carácter. Juego muy completo y con solo 19 años, está para seguir por la buena senda. Lógicamente, tiene mucho por seguir mejorando. Su presente es brillante, el futuro sumamente alentador.

Toda la introducción para presentar a la polaca Iga Swaitek (54), quien no estaba preclasificada. Ella es nueva campeona de Roland Garros. Batió sin reparos en sets corridos por 6-4 6-1 a la estadounidense Sofia Kenin (6), cuarta cabeza de serie, en una hora y 21 minutos.

Definitivamente, Iga Swiatek escribe una nueva historia para Polonia y anota al palmarés individual su primer Grand Slam.

Tras concretar su victoria, pidió permiso a la juez de silla. Con enorme sonrisa y felicidad corrió hasta las plateas del estadio Philippe-Chatrier. En medio de los aplausos de reconocimiento del privilegiado público presente, fue a saludar a familiares e integrantes de su equipo. Hubo llantos de alegría y abrazos interminables. Momentos muy tocantes en lo emotivo, fuera del protocolo, que no era lo más importante en ese instante, que la historia guardará por siempre.

El partido

El partido lo tuvo como dominadora a Iga Swiatek desde un inicio. Comenzó sacando con gran determinación para adelantarse. Al game siguiente, quebró el servicio de Sofia Kenin, quien tardó en acomodarse y reaccionó recién cuando estaba 0-3 en el primer descanso.

En la reanudación, Kenin necesitaba imperiosamente meterse en partido y lo logró con el descuento 1-3. Iga Swiatek iba al control total. Sin embargo, Kenin tuvo sus primeras oportunidades y no las desperdició para recuperar el break, acortar distancias 2-3 hasta el segundo descanso.

Kenin fue afinando sus golpes con mayor profundidad, le dio más potencia a sus saques para sostener el servicio e igualar 3-3 tras un inicio bastante tenso y errático.

La polaca varió su estrategia e intercambió golpes de todo tipo. Probó con los drop shot, que dejaban mal parada a la estadounidense, incapaz de definir puntos en la red. 

Iga volvió a quebrar. Sofia Kenin cayó en el abismo, incluso consumida por los nervios, arrojó su raqueta al suelo. La nueva campeona pasaba nuevamente al frente 4-3.

Con el servicio de Kenin en el siguiente juego, Iga definió con gran volea en la red, tuvo un punto de break, salvado por Kenin parcialmente. La tercera posibilidad de quiebre no desaprovechó Swiatek y con el 5-3 sacó para llevarse el set. Ambas jugadoras se quebraron sucesivamente. Iga Swiatek se llevó el primer set 6-4 en 48 minutos.

La definición

Se presagiaba más pelea en el segundo set, dado que Sofia Kenin emparejó el trámite en el final del set inicial, pese a perderlo. Iga Swiatek comenzó sacando. Kenin quebró y se adelantó 1-0. Era la chance para recuperar y seguir en ascenso en un momento importante. Swiatek devolvió la gentileza y también quebró para la paridad 1-1.

La nueva campeona se adjudicó arrasando los siguientes cinco juegos para ganar el set final 6-1 y coronarse nueva "Reina de París". Kenin, en desventaja 1-2, había pedido tiempo para atención médica. Fue hasta vestuarios y le mejoraron el vendaje en el muslo, con el cual jugó todo el campeonato. No hubo tiempo para reacciones, porque no se la dieron. Solo intentó con potencia, pero desmedida en la mayoría de las veces. Además de los nervios, los dolores en el muslo y sus lágrimas de impotencia, del otro lado tenía a una oponente totalmente encendida, que remató el partido con comodidad.

Ascenso y dinero

Además de la bolsa de 1.600.000. euros por ganar Roland Garros, Iga Swiatek tendrá un notable ascenso en el ranking profesional femenino. Si por llegar a la final se aseguraba por lo menos el puesto 24 del escalafón mundial, ahora irá más allá y desde este lunes amanecerá en la posición 17. Una top 20, con sobrados merecimientos.