Nada para nadie entre centroamericanos y sudamericanos, con más faltas que futbol se desarrolló un partido que quedará en el olvido de esta Copa América Centenario.

El encuentro comenzó ríspido, con la primera falta al 1’, lo que originó la tarjeta amarilla para el costarricense  Yeltsin Tejeda; esta acción fue un presagio de lo que ocurrió dentro del primer tiempo. Más de 10 faltas y poco futbol dentro del terreno de juego.

Los 15’ iniciales fueron intensos para el lado paraguayo, que con remates de Jorge Benítez y Paulo Da Silva los sudamericanos estuvieron cerca de abrir el marcador, sin embargo, el esférico se negó a entrar. Después del primer cuarto de hora, el mayor peligro en las áreas fue un remate con la cabeza de Bryan Ruíz que se fue directo a las manos del arquero guaraní Justo Villar; el cotejo no tuvo más emociones en los primeros 45’, y el marcador al descanso continuó 0-0.

La parte complementaria no cambió, el juego ríspido de ticos y guaranís siguió siendo el principal protagonista. Costa Rica intentó con más insistencia ir hacia al frente, mientras que Paraguay buscó generar peligro mediante el balón parado con hombres de buen juego aéreo como Paulo Da Silva, Gustavo Gómez y Bruno Valdez.

A diez minutos del final, un connato de bronca que se hizo presente en el rectángulo verde fue lo más destacado del segundo tiempo,  sin embargo,  fue controlado y no pasó  a mayores.

Al 88’ los centroamericanos estuvieron cerca de llevarse el triunfo con un disparo desde fuera del área de Christian Bolaños, pero Villar atajó el esférico y lo envió a tiro de esquina para evitar el tanto de La Sele.

Para cerrar el cotejo, los ticos se quedaron con un hombre menos tras la expulsión del defensor Kendall  Waston , tras una falta a Nelson Valdez, con lo que se dejó en claro lo que fue el partido durante los 90’, en dónde hubo más faltas que futbol