Tras 10 meses de ayuno en casa, Chivas regresó a la senda del triunfo, ante los Rayos del Necaxa, 1 a 0, con solitaria anotación de Ángel Zaldívar, por medio de un penal. El partido en general fue muy trabado en mediocampo y con pocas llegadas. 

Comenzó el partido en la cancha del estadio Akron, con un Chivas bastante agresivo, incluso en el primer minuto de juego, Zaldívar tuvo una clara de cabeza, que su remate se fue desviado por encima de la cabaña visitante. De ahí en adelante, Necaxa tomó el balón y lo tocó con amplio dominio por los 10 minutos consecuentes. Lo cual se era lógico con 5 mediocampistas de Necaxa, con un Víctor Dávila jugando como ‘falso 9’.

Pasados los 15 iniciales, Chivas emparejó el terreno de juego, con posesiones alternas del esférico. Sin embargo, fue Chivas quien logró anotar a los 25 minutos, tras la vía penal. Ángel Zaldívar disparó al lado derecho de Hugo, para vencerlo. Previamente, Leo López había derribado por la espalda al anotador del Rebaño.

Tan sólo tres minutos después, Isaac Brizuela encaró por el costado izquierdo y sacó un potente tiro raso que Hugo desvió y nuevamente atajó el contrarremate de Eduardo López, para mandar a tiro de esquina. Pronto Necaxa dio avisos de vida, al 33, Dieter Villalpando sacó un poderoso disparo que se fue apenas desviado a un lado del marco de Jiménez.

Aunque por momentos, Necaxa intentaba, era Chivas quien lucía más peligroso, con un par de ataques por las bandas, con Eduardo López y Brizuela. Poco antes de culminar la primera parte, la ‘Chofis’ sacó u potente cobro de tiro libre por el sector derecho, que el guardameta rechazó de puños y con complicaciones.

En los minutos iniciales del segundo tiempo, Eduardo López casi marca el segundo gol, tras un tiro centro que Hugo González manoteó cerca del ángulo superior izquierdo. Un minuto después salió de cambio por Ángel Sepúlveda, sorpresivamente, ya que venía siendo de lo mejor en la cancha.

A los 10 minutos, Chivas generó un peligroso contragolpe, con Brizuela, quien centró para Zaldívar, pero no pudo rematar por la salvadora barrida de Leo López, pero el balón siguió vivo y Sandoval recentró para que nuevamente López cortara con la cabeza.

Necaxa por su parte volvió a adueñarse del balón, tocó por todo el terreno de juego, pero no lograba concretar, o siquiera acercarse con peligro al área rival. Sólo pases laterales sin profundidad. Los pocos destellos llegaron a través de los pies de Víctor Dávila, quien era el más insistente.

Ya en la parte final del partido, lógicamente Necaxa se fue al frente en busca del gol, pero sin ideas ni argumentos futbolísticos. Chivas por su parte, aguantó hasta el final con un equipo bien parado atrás y un mediocampo solvente en cuanto a la recuperación se refiere.