La paternidad en el clásico tapatío sigue siendo para las Chivas, quien de nueva cuenta ganaron 1 gol a 0 a los Rojinegros del Atlas, con la solitaria anotación de Ángel Zaldívar a falta de 14 minutos del final. Partido parejo que pudo ser para cualquiera, pero el Rebaño hizo valer su hegemonía.

Desde que comenzó el partido se pudo notar que sería un partido dividido y peleado en todo momento. Con la posesión compartida y llegadas por ambos lados. Aunque Atlas fue un poco más insistente. Pero ninguna de real peligro, salvo unos tiros desviados y otros tapados por la zaga.

Sin embargo, el juego mantuvo la misma tónica, la de un juego cerrado y de mucha disputa de balón en el mediocampo. Ninguno era claro dominador del partido. Por lo cual el partido finalizó en su primer parte, con un empate a 0 goles.

En el comienzo de la segunda parte, Atlas mantuvo una propuesta más ofensiva que el rival, pero sin realizar una jugada de peligro, hasta los 67 minutos, luego de un balonazo que bajó de pecho, Caraglio y sacó un potente disparo justo a la humanidad del arquero rojiblanco.

Pese a que Atlas había sido mejor, Chivas fue quien se adelantó en el marcador, a los 81 minutos, luego de un desborde de Alexis Vega por el costado derecho del área, metió una diagonal retrasada para Ángel Zaldívar quien de taconazo anotó su primer gol del torneo.

Con el marcador en contra, a los Rojinegros no les quedó de otra más que ir con todo al frente, y en tiempo de compensación casi consigue el empate. Luego de un balón filtrado de Renato a Ozziel, quien mandó una diagonal para Trejo, que estrelló su remate al poste. Esa fue la última jugada para que el Rebaño se lleve el clásico tapatío.