Pareciera que después de un marcador global con diferencia de seis goles, todo fue muy fácil para los de Guillermo Almada, pero la realidad es que fue un proceso bastante largo, en el que hubo altibajos, tres torneos de cuatro bastante buenos, pero sobre todo un gran trabajo de la directiva blanquiazul. 

La ventaja obtenida en el estado de México ya nos indicaba lo que se vendría este domingo. Los equipos saltaron al terreno de juego con un 5-1 favorable al equipo local, que raramente se llega a ver en una vuelta de la gran final de la Liga MX.

Con gran entusiasmo los aficionados del equipo blanquiazul recibieron a sus jugadores a las afueras del estadio Hidalgo, cánticos, bengalas, gritos y aplausos para el equipo que estaba por coronar una temporada sin igual, y que por segunda ocasión consecutiva jugaba la final de vuelta en su propia cancha.

Almada nervioso desde el principio de juego y los jugadores altamente concentrados, salieron al terreno de juego para culminar la obra en lo que parecía un partido de trámite, sin embargo, fue el equipo visitante el que para sorpresa del público abrió el marcador del partido, con un potente disparo desde fuera del área que a pesar de haber golpeado en Ustari se coló hacia adentro de la portería.

Raúl López miraba hacia el cielo y festejaba con lágrimas en los ojos agradeciendo a su madre que lamentablemente falleció antes de la final de ida en el Estado de México.

Reacción de Tuzos

Sin embargo, la reacción no tardó por parte del equipo local, tomaron el balón y comenzaron a dominar a su rival con buenos pases y sin caer en la desesperación; fue en ese momento que se vio el resurgir del equipo y a pesar de la ventaja siguieron enviando varios elementos al ataque.

Y justo antes del medio tiempo, cayó el empate y el 6-2 en el marcador global; la desesperanza se vio reflejada en los rostros de los jugadores del Toluca, que tuvieron un segundo tiempo cuesta arriba con cuatro goles de desventaja nuevamente.

El “Toro” Ibáñez cerró con broche de oro

La temporada goleadora de Nicolás, tuvo un final espectacular, haciéndose presente en el marcador de vuelta al minuto 52 con una maravillosa jugada en la que encontró un balón retrasado en el área grande, con un potente y preciso derechazo mandó el esférico directo a las redes dejando sin posibilidad de reacción a Volpi.

Con esta anotación llegó a los 16 goles en la temporada, siendo el delantero más contundente de todo el Apertura 2022, y sin duda parte fundamental del campeonato para el equipo de la “Bella Airosa”.

Ya en los últimos minutos del partido, un polémico penal fue señalado en favor del Pachuca; sin embargo, Gustavo Cabral tomó el balón, y con seriedad mandó a guardar el balón para poner la cifra definitiva de 3-1 en el partido de ayer y un aplastante 8-2 global del que los Diablos ya no pudieron reponerse.

De esta forma el equipo del presidente Armando Martínez se coronó campeón de la Liga MX después de muy buenos papeles en tres de las últimas cuatro liguillas. Y siendo, sin duda alguna, el mejor equipo del 2022 en el futbol mexicano, con dos finales jugadas y un campeonato que ahora suma la séptima liga para los Tuzos.