El Naturhouse La Rioja tiene ya un pie en la próxima Liga de Campeones tras ganar al Fraikin Granollers con superioridad, por 31-26, con lo que aventaja en cinco puntos a sus perseguidores -el equipo catalán y el Huesca- cuando solo quedan seis en juego.

El equipo riojano, invicto en la segunda vuelta, superó por completo al Granollers, que fue incapaz de hacer frente al juego local si bien no ha encajado una derrota mayor gracias a las individualidades de Niklas Grundsten y Rodrigo Salinas.

Y así, prácticamente con solo dos jugadores metidos en el partido, era difícil que el equipo catalán opusiera resistencia a un Naturhouse más dinámico y comprometido, con todos sus componentes mentalizados y conscientes de lo que se jugaban.

El equipo de Logroño tomó la iniciativa rápido, con Petrus, Tioumentsev y Eilert muy agresivos en el centro del ataque, donde sorprendieron a una defensa mucho más efectiva en otros encuentros, que cuando se dio cuenta de dónde estaban sus carencias, había encajado media docena de goles.

Solo tras el primer cuarto de hora el Granollers empezó a ajustar su defensa y eso equilibró un poco el partido, pero no el marcador, que siguió favorable a los riojanos por distancias de, como mínimo, cuatro goles.

De hecho, el Naturhouse pasó por un mal momento cuando se acercaba el descanso, con más dudas en ataque, pero con dos contraataques -como no, de Petrus y Tioumentsev- llegó al intermedio más que cómodo (16-10).

El Naturhouse dominó de cabo a rabo todo el encuentro

Tampoco tuvo muchos problemas para defender su renta en el inicio del segundo periodo, en el que supo frenar la iniciativa del Granollers, que trataba de encontrar huecos en la defensa riojana, sin éxito.

El Granollers se desesperó y dejó de creer en sus posibilidades de remontar, salvo Grundsten, que asumió por completo la responsabilidad en su equipo y con sus lanzamientos consiguió que el conjunto catalán no quedara muy pronto sentenciado.

Pero su esfuerzo, y la calidad individual de Rodrigo Salinas, eran muy pocos argumentos ante un rival que solo perdió algo de fuelle al final, cuando tenía el triunfo en las manos y, con él, muchas opciones de volver a la Liga de Campeones.