Era un partido trascendental para los intereses de la selección española femenina de balonmano en el Campeonato de Europa. Una victoria les ponía las cosas muy de cara a las chicas de Jorge Dueñas, además de por ser el primer encuentro, por la dificultad de los otros partidos que les quedan en el grupo. Y las "Guerreras Olímpicas" lo tuvieron claro desde el minuto 1.

La defensa española comenzó de la mejor forma posible. No dejaba penetrar a las jugadoras polacas en ninguna de las zonas. Un 6:0 genialmente planteado por Jorge Dueñas con muchísimas ayudas, lo que no permitía a Polonia jugar con comodidad, en especial en la primera línea. Gracias al contraataque, en seguida, consiguieron una renta de dos goles (3-1).

El primer tiempo fue de alternativas

Si hubo una de las “Guerreras” que estuvo especialmente bien fue la zurda Carmen Martín, que lideró la primera ventaja española. Pero las polacas tienen calidad, y no dejaron que se marchase su rival, con una gran Niedwiecz. Ahora era Polonia la que dominaba y logró darle la vuelta al electrónico y colocarse por delante en el marcador por primera vez en el encuentro pasado el minuto 10 (5-6).

Y con la exclusión a una polaca, tomaron las riendas las chicas de Jorge Dueñas, que volvieron a dominar, juego y marcador, y del 6-7 se pasó, con dos goles consecutivos de Bea Fernández, al 10-7. El técnico de las polacas, Kim Rasmussen, se veía obligado a pedir un tiempo muerto ante los fallos de sus chicas.

Polonia tuvo un atisbo de reacción y, merced a dos pérdidas de balón, pudo volver a colocarse a un solo gol de distancia (12-11). Pero las de Dueñas pusieron, de nuevo, la sexta marcha en defensa, bien secundadas por Silvia Navarro bajo los palos, y pudieron salir al contraataque devolviendo la renta de cuatro tantos al luminoso (15-11). Mención especial merece Carmen Martín que metía toda bola que le llegaba, ya fuera desde los siete metros, bien desde la zona exterior.

A falta de 20 segundos para el final, con renta de tres goles a favor, Jorge Dueñas pedía tiempo muerto para explicar la jugada final, pero sus chicas no pudieron rematar el gran primer tiempo y se marcharon con tres goles de ventaja (16-13).

Las Guerreras, cada vez mejor

Tras el paso por vestuarios, España varió la defensa del 6:0 al 5:1. Pero las cosas no cambiaron en demasía. Seguía dominando el equipo de las Guerreras, controlando el encuentro sobre los tres-cuatro goles de ventaja, pese a varias exclusiones tanto en uno como en otro bando.

Hasta que las pérdidas de balón de las polacas, fruto de los nervios al ver que no podían penetrar en la defensa española, hicieron que España se marchara en el marcador hasta lograr una renta de seis goles, y bola para tener siete, pero reaccionó el cuadro polaco y se puso a cuatro goles. Pero cuando no salen las cosas en ataque, las victorias se logran en defensa y, sobre todo, en portería. Surgió la figura de Silvia Navarro, que impidió que cundiera el pánico sobre las Guerreras.

España ya tenía el partido en el bolsillo. Sólo tenía que manejar los tiempos y el electrónico. ¡Y de qué manera lo hicieron las chicas de Jorge Dueñas! Si no aparecía la defensa, aparecía la portería, y en ataque fallaron poco. Así hasta que en los últimos lograron marcharse con la máxima renta que tuvieron en todo el partido, el +7 con el que se llegó al final (29-22).

A la espera de lo que ocurra en el partido entre Hungría y Rusia, España es primera de grupo con 2 puntos.