Inició intenso de los tigres, entró muy decidida y anhelaba prolongar su invicto en la máxima categoría del fútbol inglés. Se asociaba, tuvo la posesión del balón, tomaba protagonismo del partido y sobre todo no dejaba que los clarets generaran ocasiones de gol. Aunque por momentos le costaba anular algunos tibios ataques del Burnley sin mucha premura.
Hull City intentaba plasmar su poderío ofensivo, el partido estaba muy parejo aún no hubo ocasiones claras alguno de los dos tendrá que animarse a tomar más protagonismo y ser más preciso en definición.
A los 9 minutos, los tigres comenzaron a sufrir con algunos intentos de los clarets aunque no tuvieron fortuna. Burnley empezaba a asentarse y respondió con argumentos futbolísticos.
Hubo un par de ocasiones no muy claras en ambas áreas, aunque Hull City no tiraba la toalla y continuaba intentándolo a través del balón detenido. No hubo parcialmente un dominador absoluto, los tigres lo intentaban más.
Burnley aprovechaba algunos contragolpes, pero no era capaz de dejar en jaque a los defensores locales. Su juego era muy directo e intenso y muy poco claro. En 20 minutos de juego sólo apreciamos una ocasión de gol, la de Abel Hernández, la tónica del partido no cambió, era momento como para pensar que alguno de los dos debería arriesgar un poco más.
Los tigres empezaron a neutralizar el juego del equipo rival en el mediocampo, avisaba constantemente que estaba más cerca. Burnley no se quedaba atrás, le respondió con un planteamiento muy directo. El partido evidenciaba poca elaboración y precisión en ataque, eso se vio reflejado en el primer tiempo.
De cara al complemento ambos tendrán que replantear sus esquemas si es que pretenden sumar en este encuentro. Burnley lo incomodaba pero nunca se ánimo a asfixiarle las salidas al cuadro local. Un partido trabado, Hull City no ha convencido con su juego colectivo y tendría que capitalizar mejor las ocasiones que generase.
Todo para el final
En el segundo tiempo, los clarets intentaban tomar más protagonismo aunque le costó muchísimo por como Hull City le planteaba el partido. Un recital de pases bien hechos, aunque la forma en cómo se desarrolló no cambió muy intenso, trabado y Burnley lo ajustaba a sus necesidades futbolísticas.
Los tigres se apresuraban demasiado en la ejecución de tiros libres y balones detenidos, su rendimiento fue muy irregular a tal punto que no le daba garantías porque en la Premier cualquier sorpresa puede pasar.
A los 56 minutos, Diomande estuvo cerca de anotar el primero para los tigres. Un partido muy extraño, parejo y cerrado. Estaba para cualquiera, aunque Hull City hizo todo cómo para poder estar en ventaja pero no lo consiguió.
Los tigres la pasaban mal, peor aún le cedió la posesión del balón a los clarets, un partido típico de la máxima categoría del fútbol inglés, intenso, trabado, con pocos espacios y cerrado.
Hull City continuaba invicto, las dudas en torno a su rendimiento colectivo dejaban muchas dudas estaba muy distante de aquel equipo que consiguió el ascenso en la temporada pasada.
Burnley propuso más, se arriesgaba, aunque planteaba el encuentro como quiso aprovechándose de la desesperación de los tigres. Los clarets tuvieron las más claras en el segundo tiempo y siempre anticiparon a sus rivales.
A los 72 minutos, Steven Defour anotó el primero y le daba forma a un golpe sorpresivo en el momento más inesperado. La pasividad del Hull City fue alarmante, sólo se apoyaba de sus individualidades y no pudo reponerse colectivamente.
Fue el premio a la insistencia, los clarets siempre tuvieron claro como incomodar al Hull City. Una segunda mitad complementa sorpresiva en comparación con la primera. Los tigres pagaron muy caro el no estar precisos en definición. En el último minuto de adición, Robert Snodgrass salvó a los tigres. En la quinta jornada que se jugará entre el viernes 16 y domingo 18 de septiembre, Burnley visitará a Leicester City y Hull City será local ante Arsenal.
