Adrián González sufre una rotura muscular en el adductor largo de su pierna izquierda, según ha confirmado el propio club, y estará de baja por un espacio de al menos cuatro semanas. Una baja difícil de suplir para José Luis Mendilibar, que había utilizado, por delante del doble pivote, al mediocentro durante las primeras jornadas y su resultado había sido más que notable. De hecho, hasta ahora había disputado los ocho encuentros y había marcado dos tantos.

El madrileño, tras el descenso del Elche en verano, rescindió su contrato con el conjunto ilicitano y se comprometió para las tres próximas temporadas con la Sociedad Deportiva Eibar. Llegó a mediados de agosto y se incorporó a la concentración armera en El Burgo de Osma, donde comenzó a hacerse un hueco importante en los planes del entrenador. En su octava temporada en la élite el centrocampista tenía, una vez más, la permanencia como objetivo.

Hasta la lesión no le habían podido ir mejor las cosas a Adrián González. Titular en los ocho primeros encuentros, fue el encargado de materializar el primer tanto del conjunto eibarrés en la primera jornada ante el Granada. Una semana más tarde repitió en la histórica victoria ante el Athletic en casa (2-0) y, a pesar de haber sido sustitudo varias veces, ha sido uno de los protagonistas en este gran arranque del equipo de Ipurua.

Mendilibar pierde, por tanto, una pieza clave en su esquema. Habiendo disputado 638 minutos hasta ahora el técnico vizcaíno no podrá contar con el mediocentro el próximo mes, lo que hará que se pierda los duelos ante Barcelona, Rayo Vallecano, Getafe y Villarreal. Llegaría, aunque de manera justa, para la visita del Real Madrid, club donde se formó de pequeño. Una baja sensible que deberá solventar el Eibar en los cuatro próximos duelos.