Vuelven los problemas a la enfermería de Osasuna. Dicen que las desgracias nunca vienen solas, y así fue. Corría el minuto 40 del partido cuando Puñal, con gesto de dolor, hizo señas hacia el banquillo, dejando entrever que no podía continuar. Efectivamente, el jugador navarro había sufrido una lesión muscular que a posteriori y tras ser examinado en la Clínica San Miguel se definió: rotura de grado I del músculo semitendinoso de la pierna derecha.

Minutos después, en el 44 exactamente, fue el alicantino Miguel de las Cuevas quien se tendió en el césped tras un encontronazo. Los gestos del jugador denotaban que una vez más debía de ser sustituido. En esta ocasión la lesión que acarrea el jugador, según los médicos de la anteriormente mencionada clínica, es una fractura en la falange proximal del tercer dedo del pie izquierdo.

Los periodos de baja de ambos jugadores se estiman en torno a un mes, pudiendo ser la del capitán navarro de tres semanas si la recuperación se produce sin problemas. Pese a las lesiones, ambos deportistas acudirán a Tajonar a ejercitarse en los gimnasios e ir avanzando con sus recuperaciones.

En el día de hoy la plantilla rojilla ha tenido un día de descanso, pero mañana se retomarán los entrenamientos, donde Javi Gracia comenzará a preparar el partido del próximo viernes frente al Elche. Todas las miradas se centrarán en quiénes pueden ser los sustitutos de los jugadores lesionados, aunque todo apunta a que Torres será el que sustituya a de las Cuevas, dejando abierta la puerta a Lolo o Loé para sustituir a Puñal, según plantee el encuentro frente al conjunto ilicitano.