Ya lo decía Pedro Munitis en rueda de prenas: "Puede ser un campo trampa". Y menuda ratonera ha preparado el Cacereño en el Príncipe Felipe. Irreconocible para los aficionados verdiblancos, que recuerdan la goleada 4-0 de la ida, el Cacereño salió con una grandísima intensidad. Presión intimidante, apretando al rival en cuanto recibía balón... Ya se vieron desde el inicio las dificultades del Racing para mover el balón y cuando la pelota no circula... malo para los cántabros.

Ante un Cacereño enchufado, el Racing no tuvo su día y eso que se jugaba mucho tras el empate del Racing de Ferrol en Villaviciosa, teniendo la oportunidad de recortar dos puntos con su rival por el liderato. Como decimos, cuando el balón no va por el verde es un mal síntoma para el conjunto cántabro. Irreconocible también para sus aficionados, el Racing apenas creó peligro, ni por las bandas, ni la dupla de delanteros... y para mayor sorpresa de todos la defensa tuvo, probablmente, uno de sus peores partidos en mucho tiempo.

Un Cacereño extramotivado, un espeso Racing

El primer y único remate a portería del Racing llegó en el minuto 78

El estado del césped no ayudaba mucho al juego combinativo que intentan practicar los verdiblancos pero es que el Cacereño se estaba llevando todos los duelos individuales; cada balón dividido iba para los locales. Colectivamente, el juego era bastante parejo en los instantes iniciales: ninguno pudo combinar ni dominar el balón y tampoco se crearon grandes oportunidades de gol. El Racing llegó con algún balón largo a Pumpido que la defensa o el portero pudo achicar. También la tuvo Dioni a la carrera pero no vio la llegada de Óscar en buena posición.

La tempranera cartulina que recibió Francis hizo ver al Cacereño un buen nicho que explotar en ataque. Las entradas del conjunto extremeño fueron constantes por el costado zurdo de su ofensiva. Y tanto fue el cántaro a la fuente que acabó por agrietarse. Falta clara de Francis, merecedora de amarilla -sería la segunda- para el público local. El balón lo puso Valverde desde ese margen izquierdo, cerrada, con rosca hacia dentro, un buen envío para el remate. Pero el balón sobrepasó a la defensa, botó delante de Óscar Santiago y se coló por el palo largo. Fallo defensivo, fallo del portero o simplemente calidad de Valverde... lo único seguro es que el Cacereño se adelantaba en el luminoso a la media hora de juego.

Un 'viejo conocido' para el Racing: el balón parado

El balón parado fue uno de los quebraderos de cabeza para la defensa del Racing al inicio del curso

Siguió apretando el Cacereño aprovechando la caraja del Racing que ni creaba ni destruía. De nuevo a balón parado, Valverde al lanzamiento desde una posición muy alejada del área, en campo propio. La puso el jugador local al área, no dudó en aprovechar una de las debilidades del Racing en ciertos momentos de la temporada. El balón, bombeado, fue dejado por Mansilla de cabeza para la entrada de Gallego al segundo palo, ganando la partida a la defensa y rematando a placer. El segundo y mazazo para el aspirante a líder.

Se vino algo arriba el Racing al final del primer tiempo sin suerte. Apenas la tuvo en un córner con varios rechaces, pero nada. Con un contundente y merecido 2-0 se iban ambos conjuntos al descanso. Mucho le tocaba remar al Racing en la segunda mitad.

El Cacereño insiste en el segundo tiempo

Parecía que el Racing salía con otro aire en el segundo acto. Más enchufados, más metidos, la tuvo Pumpido tras una gran acción individual de Fede pero la defensa se echó encima enseguida y el argentino estuvo lento con la pelota en los pies. Parecía que sí pero... enseguida se vio que hoy no era el día.

El Cacereño mostró la mejor cara de la temporada liderados por los hombres de calidad, Valverde y Gallego

Tampoco Munitis arriesgó demasiado en los cambios. Perdiendo, hizo cambio hombre por hombre, extremos por extremos, dando entrada a Artiles y a Couly, hoy en banda. Poco a poco, el Cacereño volvió a imponerse en intensidad y juego. La tuvo Mulder gracias al malhacer defensivo del Racing en la mañana de hoy. Pase de gran calidad de Valverde a la espalda de la defensa que no acabó de entenderse con Óscar Santiago y el ariete local a punto estuvo de llegar al remate.

Espesor, golazo y goleada

La espesura del Racing se fue multiplicando con el paso de los minutos y a balón parado seguía dando miedo el Cacereño con el guante de Valverde al saque. Y pasada la hora de juego llegó la sentencia. Buen pase de Valverde hacia la frontal donde, completamente solo, aparecía Gallego para empalar de primeras. Imparable para Óscar Santiago y golazo para refrendar la goleada. 

El Racing mostró una de sus peores caras de la temporada en el momento menos oportuno

Ya con el partido visto para sentencia, Dioni estuvo a punto de recortar distancias pero su disparo lo repelió el meta local, Montiel. Fue la primera vez que el Racing exigió algo al portero rival. La tuvo, ya en los últimos cinco minutos, Migue, con un saque de córner cerrado que sacó Montiel cuando se envenenaba. 

Para rematar, pudo llegar el cuarto. Mulder estuvo a punto de lograr su ansiado gol pero Óscar Santiago rechazó su remate. De nuevo, centro desde la banda y caraja defensiva, el delantero llegó solo al segundo palo. 

Y así se llegaba al final del encuentro. Justa victoria del Cacereño que dominó a su rival de principio a fin. Intensidad para no dejar jugar y aprovechando sus opciones a balón parado. El Racing no tuvo su día y se vuelve de Cáceres con una dolorosa derrota y una pésima imagen. Cuando parecía que podría recortarle dos puntos al Racing de Ferrol... el conjunto gallego tiene uno más de diferencia. Por su parte, el conjunto extremeño sale del descenso de forma provisional.