Villareal B y Racing medían sus fuerzas en el estadio de La Cerámica (domingo 21:00) como uno de los cierres a esta jornada 28 de LaLiga SmartBank. Dinámicas contrapuestas entre un filial irregular con más puntos (34) que sensaciones y unos cántabros (30) con la moral alta tras doblegar al Leganés en un partido muy completo de todo el equipo. La posible victoria visitante serviría para poner tierra de por medio con la Ponferradina y a su vez reenganchar a la lucha por el descenso a varios equipos de la zona media-baja.
Continuidad
Varios debates asaltaban a los aficionados racinguistas en torno a la alineación de JAL. La vuelta de jugadores clave como Juergen Elitim y Jorge Pombo presagiaban cambios en la formación inicial. Sin embargo, el buen hacer de Íñigo Vicente en la mediapunta, así como de Íñigo Sainz-Maza (ya recuperado de su episodio alérgico) y sobre todo Aldasoro en la medular les hizo gozar de una continuidad merecida a los hombres artífices de la reciente victoria ante el CD Leganés. La presencia además de ambos todocampistas era indicativa de, en principio, un corte más defensivo del equipo, aunque también podía traducirse en una presión más intensa y asfixiante a la salida del Villareal B.
El encuentro arrancaba con un Villareal B dominador que buscaba inquietar la meta de Miquel Parera con precisos desplazamientos en largo y disparos desde la frontal ante la pasividad de la defensa visitante. Hasta en cuatro ocasiones eran capaces los amarillos de armar la pierna sin apenas oposición en la frontal, con un Hassam que campaba a sus anchas en banda derecha. Por contra, Germán coqueteaba con una amarilla temprana hasta en tres ocasiones, todas ellas en acciones evitables en las que el central andaluz llegaba tarde y con fuerza desmedida al choque.
Pese a que las fuerzas se igualaron pronto gracias a una buena conducción de Íñigo Sainz-Maza que finalizó con un potente disparo (pudiendo asistir también a un Roko bien desmarcado) el marcador no se movió hasta el descanso por las bajas prestaciones de ambos equipos, en especial de los pupilos de JAL que apenas eran una sombra de lo mostrado hace unos días en El Sardinero.
Sorpresa con final esperado
La segunda parte comenzó de manera muy similar a la primera. El Villareal B inquietaba la meta de Miquel con demasiada facilidad aunque sin poner en demasiados aprietos al balear. Por contra, los verdiblancos -esta vez de rojo, estrenando equipación (trataban de combinar buscando por dentro a Sangalli, Mboula e Íñigo Vicente sin demasiado éxito). Cuando peor pintaban las cosas para los intereses visitantes, un despeje milimétrico de Sangalli plantaba prácticamente solo a Vicente en el área, que con un pase medido sorteaba al último defensa local. Jordi Mboula llegaba algo apurado para, con una vaselina de muchísima clase, superar a Iker Álvarez en un verdadero golazo de los racinguistas. 0-1 en el minuto 63 y contra todo pronóstico el Racing se ponía por delante.
Cuando lo más difícil se había conseguido, un nuevo disparo desde la frontal por parte de Sergio Lozano (otra vez sin oposición) rebotaba en Germán y hacía imposible la parada de Miquel. 1-1 min. 67 sin apenas tiempo para contemporizar el gol, y el Villareal B hacía justicia a lo acontecido hasta el momento.
Todo parecía indicar que el encuentro terminaría con reparto de puntos ante la ineficacia de ambos conjuntos por inquietar la portería contraria. La entrada de Juergen, Pombo y Matheus no se tradujo en un mayor dominio visitante y eran los locales los que, tras una jugada por banda derecha en la que Germán rompía el fuera de juego de manera imperdonable, Carreira ganaba la línea de fondo para que Álex Millán remachara el tanto de la victoria (2-1 min. 87). Ni siquiera en los minutos finales y yendo por debajo en el marcador fueron capaces los cántabros de inquietar la meta defendida por Iker, con una cara totalmente opuesta a lo mostrado hace apenas 6 días en Santander. En definitiva, duro golpe para los intereses verdiblancos que ven como dejan pasar una gran oportunidad para asestar un golpe de efecto a la clasificación. Tocará tratar de recuperar sensaciones ante un Andorra que por fin consiguió la victoria tras varias jornadas ante un Sporting en problemas. El sufrimiento sigue.
Nombres clave
Rubén Alves: No es noticia. El defensa hispano-brasileño fue de nuevo el mejor con diferencia en acciones defensivas, siempre atento a su espacio y al de su compañero. Jugando al 60% por su lesión de tobillo sigue siendo más determinante y fiable que cualquier compañero que haya probado en el perfil diestro. ¿Veremos a Mantilla?
Jordi Mboula: Juega tranquilo, pone pausa y busca encarar cuando la acción lo pide. Interpreta bien el juego y empieza a coger esa chispa que le faltaba al inicio de temporada. Está en racha de cara a puerta. Le falta entenderse mejor con Dani Fernández.
Íñigo Vicente: Amo y señor del balón en la jornada pasada, el "10" pasó más desapercibido debido a la escasa posesión del equipo. Aún así mostró intensidad y calidad en diversas acciones, y asistió con precisión en el 0-1. Insustituible en este equipo.
Germán: Volvió a ser la nota discordante de la zaga. Impreciso y acelerado desde el comienzo, contribuyó en ambos goles del Villareal B. No se encuentra cómodo y se nota. Urge un cambio para resetear.