Las rotaciones. A ellas se le achacan las derrotas pero nunca las victorias. Es decir, cuando el técnico decide hacerlas y el partido se pierde, la culpa es suya por hacerlas. Ahora bien, cuando se gana porque los jugadores, a priori titulares, están frescos debido a que descansaron en el encuentro anterior, nadie se da cuenta.
Marcelino García, técnico del Villarreal, es partidario de disponer de una plantilla larga de garantías para poder hacer un buen papel en las tres competiciones en las que se encuentra inmerso el "Submarino Amarillo" (Liga, Copa del Rey y Europa League). La secretaría técnica del club ha hecho un esfuerzo considerable este verano trayendo jugadores de perfiles muy distintos para satisfacer las peticiones del míster. Se han renovado completamente las parcelas más ofensivas: delanteros y extremos. Así Marcelino ha conseguido lo que quería, tener también mucha calidad en la banca. Hombres como Denis Suárez, Adrián, Samu García o Bakambu esperarán habitualmente una oportunidad en las segundas mitades de los encuentros.
Además, también está teniendo muy en cuenta a los canteranos. Cabe recordar que el pasado domingo en el Ciutat de València, Alfonso Pedraza partió de titular. Por otro lado está el caso de Nahuel, quien está entrando cada vez más en los planes de Marcelino. Su confianza va en aumento y su nivel de juego también.
Desde que llegó al club, el técnico asturiano ha abogado por esa manera de repartir los minutos y dar confianza a hombres que teoricamente parten como suplentes. En ocasiones, cuando se dan malos resultados, parte de la afición recrimina a Marcelino este tipo de rotaciones. A pesar de ello, como se pudo ver al término de la pasada temporada, son muy necesarias. Una plaga de lesiones afectó al Villarreal y hombres como Sergio Asenjo, Mateo Musacchio o Bruno Soriano, se perdieron el último tramo de la temporada.
Y es en estos últimos meses donde se decide el devenir del equipo en las competiciones en las que participa. La pasada campaña, el equipo echó de menos a estos jugadores, que son pilares básicos en el juego del "Submarino Amarillo", y lo acusó cayendo eliminado de la Copa del Rey ante el Barcelona en semifinales y en cuartos de final de la Europa League ante el Sevilla.