El entrenador del Villarreal CF, Marcelino García Toral, ha hablado hoy ante los medios de comunicación para tratar el partido que disputará el “Submarino” el domingo día 10 de enero contra el Sporting de Gijón.
El entrenador asturiano tiene como objetivo conseguir los tres puntos para seguir con la buena racha que llevan obteniendo desde hace unas semanas: “Este es un partido muy importante, hay muchos enfrentamientos de equipos de arriba y nosotros jugamos en casa. Más que por igualar un récord, lo que importa de verdad es sumar los tres puntos. Y para lograrlos, tendremos que esforzarnos al máximo. Nunca hay rivales más o menos asequibles, no podemos cometer ese error y menos nosotros. Además, ya tenemos experiencias similares de jugar con equipos que estaban abajo en la tabla y no hemos ganado, por lo que no debemos pensar nada parecido. Tenemos máximo respeto por el Sporting, debemos decirlo, tenerlo siempre presente y, sobre todo, demostrarlo en el campo. Sabemos que, de no tener ese respeto y de no estar al máximo nivel, tendremos problemas”.
El técnico se enfrenta a un equipo del cual tiene muchos recuerdos en mente y por ello para él será un partido difícil por el cariño que siente al Sporting: “Me agrada que el Sporting esté en Primera, pero jugar contra ellos no me gusta. Son sensaciones encontradas porque yo quiero ganar y ellos no están bien. No es un partido esperado. Quiero que esté en Primera, tengo muchos amigos en el club y he pasado media vida allí. He pasado por todas las etapas, desde juvenil a entrenador, por lo que siento un enorme agradecimiento al club y soy del Sporting. No es agradable ganarles, pero quiero ganar”.
El Sporting de Gijón es uno de los equipos más difíciles de la Liga debido a que van a ir a buscar los tres puntos desesperadamente debido a la situación del club en la tabla clasificatoria: “Espero un rival intenso con un alto ritmo de juego. Están en una situación complicada y eso les puede pesar, pero sabemos que nos van a exigir mucho y que son peligrosos a la contra. Es un equipo constante y que nos va a suponer un gran esfuerzo, lo sabemos. Los últimos partidos los hemos sacado gracias a la seguridad defensiva, algo que sabemos debemos mantener, si queremos competir igual seguir en esta línea”.
El partido contra los asturianos se jugará en casa, donde el ambiente es el más adecuado debido a la gran confianza que le da el público: “No hacemos las cuentas de la lechera, vamos a ir uno a uno, y ya veremos. Es verdad que en casa somos competitivos, pero eso puede cambiar. Un partido depende de pequeños detalles y así como ahora ganamos fuera y no lo hacíamos antes, las cosas pueden cambiar en casa. Pensamos partido a partido, sabemos que si de los doce puntos sacamos los nueve de casa, tendríamos una puntuación muy alta”.