Irán para este nuevo Mundial de Rusia que se avecina, contará nuevamente con la dirección técnica del portugués Carlos Queiroz. El ex director técnico de Real Madrid también la dirigió en la Copa del Mundo de Brasil. Para su idea de juego, en el arco contará con la presencia del arquero Alireza Beiranvand, quien viene de sufrir cuatro goles en su portería en los amistosos contra Turquía, Argelia y Túnez.
En la defensa su principal virtud es su manera de protegerse. Sin embargo Ramin Rezaeian es un lateral que colabora en el ataque. En uno de los partidos preparatorios, le cedió el pase a Kaveh Rezaei para que anote su gol frente a Sierra Leona. A pesar de ello, la prioridad será mantener un fuerte dispositivo defensivo para generar más tarde situaciones de contragolpe. Esa es la propuesta principal del entrenador Queiroz para mantener su valla en cero y aspirar a un certero contraataque.
Además el plan de juego consiste en ser seguros y combativos para suplir las virtudes de los equipos que tienen mayor experiencia y figuras en sus planteles. En el ataque Alireza Jahanbakhsh y Sardar Azmoun arman una buena sociedad como en la jugada del gol en el triunfo ante Argelia, en un ensayo de preparación. Azmoun tuvo una muy buena temporada en Rubin Kazán porque marcó cinco goles y colaboró con seis habilitaciones. Por su parte, Jahanbakhsh finalizó la temporada en Holanda, como el máximo artillero.
Mientras tanto, Mehdi Taremi también colabora con los goles como en ese encuentro ante los argelinos, tras un pase de Ehsan Haji Safi. A su vez Haji Safi fue partícipe en el tanto de la victoria ante Uzbekistán por 1 a 0 porque asistió a Rouzbeh Cheshmi quien convirtió de cabeza. Los defensores Mohammad Reza Khanzadeh y Ali Gholizadeh pueden ser otros aportes en la parte ofensiva que tiene poco poder de fuego. En consecuencia, Irán presentará una alineación que no tendrá una clara intención de generar jugadas pero que dará batalla para no perder sus encuentros.