Sebastián Sosa (2): el uruguayo tuvo un partido para el olvido, posiblemente el más lamentable desde que arribó a Independiente. La primera vez que le cabecearon fue gol, aunque se puede atribuir a una mala marca del defensor que custodiaba a Rodríguez, y al gran gesto técnico de este. Sin embargo, en el segundo tanto intenta gambetear a Acevedo y concede el 2-0 cuando el cotejo se posicionaba favorable para el Rojo. Una sola atajada al inicio y nada que hacer en el tercero. Si venía cuestionado, su presentación hoy lo dejó más abajo en la consideración del hincha, aunque los neutrales presentes en el estadio lo aplaudieron en señal de apoyo.

Alex Vigo (5): con ganas y vergüenza deportiva le alcanzó para resaltar. Se le suele criticar la forma en la que tira los centros, pero cada vez son menos los errados y más los que generan peligro. Queda al deber bastantes veces en defensa, pero sus subidas son claves en el ataque, lo que demostró hoy siendo socio de Leandro Fernández y trepando por la derecha hasta el último minuto. En un mal contexto, es bueno que este tomando confianza y levante su rendimiento.

Sergio Barreto (3): así como hay momentos donde muestra su gran timing para la marca, tiene descuidos que cuestan caro al equipo. Si bien Rodríguez se llevó la mayoría del mérito en el 1-0, el Muro lo dejó saltar bastante cómodo. No tuvo despistes importantes, pero no brindó seguridad al igual que su compañero de zaga.

Juan Manuel Insaurralde (2): a la par de Sosa, uno de los referentes del plantel por su experiencia y trayectoria, fue importante en la derrota. Más allá de que hace varios encuentros no es garantía, hoy fue decisivo con ese resbalón (ante el cual en vez de levantarse se quedó pidiendo una falta inexistente) permitiendo que Rodríguez anote el 3-1. Por si fuera poco, casi se hace expulsar sobre el final por un golpe sin pelota, algo que lamentablemente no es poco usual en el Chaco.

Lucas Rodríguez (4): intentó muchos centros que fueron despejados por los centrales del Patrón, buscando a Benegas. Es un jugador que conoce sus limitaciones, aunque hoy logró entrar al área con pelota dominada y generó una chance que pudo ser el descuento. No destacó, pero intenciones no le faltaron.

Gerónimo Poblete (4.5): el ex San Lorenzo no logró ser determinante como en partidos anteriores, pero aún así dejó claro que es importante en el esquema propuesto por Domínguez. Además de algunos cortes que logró en el primer tiempo, el equipo se comenzó a desarmar tras su salida (fue el primer sacrificado en los cambios para que entre Márquez), al punto que cuando salió Saltita González ingresó Marcone para suplir el puesto de 5 tapón. Hoy está más adentro que afuera del club, y sería algo positivo su continuidad.

Lucas Romero (5.5): el Perro consiguió callar varias críticas desde que abandonó la posición de 5 y se colocó como interior, teniendo buena llegada al arco rival y asociándose para generar peligro. Hoy volvió a anotar tras una hermosa jugada y siguió yendo para adelante pese al resultado. Antes se ponía a otros capitanes por sobre él, hoy demuestra dentro y fuera del terreno que esa cinta es suya. 

Lucas González (4): se le abona a Saltita la gran asistencia en el gol de Romero. Sin embargo, no pesó en el cotejo, sigue pecando de tardar en soltar el balón y es frecuente que salga por golpes o lesiones. No logra consolidarse cuando se le presentan las chances.

Leandro Fernández (6): la figura de Independiente desde hace rato, en su rol de extremo derecho. Desde esa zona logra hacer uso de su calidad técnica, su intensidad y su voluntad. La mediocridad generalizada hace que resalte más su labor, buscando por todos los medios generar situaciones para marcar, anotando uno anulado de forma dudosa y corriendo los 90 minutos. A veces se excede o elige la más difícil, pero muestra jerarquía y ganas en cada instante que le toca jugar.

Juan Cazares (3): Juanito venía de un ingreso ideal ante Atlético Tucumán, pero no pudo repetir la dosis en Paraná. El ecuatoriano estuvo a una marcha menos durante todo el cotejo, realentizando los avances y, sobre todo, errando muchos pases, lo que es poco usual teniendo en cuenta su nivel técnico. No logró habilitar de forma clara a sus compañeros y fue displicente en el retroceso en varios pasajes.

Leandro Benegas (2.5): el Tanque claramente no tiene cualidades fuera del área, algo que casi siempre logra compensar con goles, pero no pudo ser así en esta oportunidad. Justamente estas no le faltaron, ya que pateó dos veces prácticamente mano a mano y definió al cuerpo del arquero y afuera. Tampoco pudo ganar en la mayoría de los duelos aéreos y por bajo ante los defensores rojinegros. Es voluntarioso y evidenció lo eficaz que puede ser, ojalá sea solo un tropiezo para el Tuco.

Rodrigo Márquez (2.5): como dijimos en la crónica, el Chila no viene de buenos rendimientos cuando le toca ingresar, y hoy no fue la excepción. Poco después de entrar, pierde la pelota que derivó en el 3-1, y abusó del traslado y el remate cada vez que contó con la posesión pese a mostrarse comprometido. Despertó el enojo de sus compañeros en más de una jugada.

Iván Marcone (3.5): ingresó para volver a tener un 5 en el equipo, pero no participó mucho. Patronato casi no atacó, y el flamante refuerzo intentó varios centros que no prosperaron.

Gastón Togni (3): un cambio inentendible teniendo en cuenta que, según se dijo, corría de atrás en la consideración de Domínguez. Esto último es comprensible, ya que no trascendió durante el tiempo que estuvo en cancha.