Juan Martín del Potro venció a John Isner por (5)6-7, 6-3, 7-6(4) y 6-2, volvió a posicionarse en una semifinal de Grand Slam (la segunda del año) y exhibió nuevamente un nivel superlativo, digno de un podio del ranking ATP.

Luego de su victoria, el argentino tuvo contacto con los micrófonos y se mostró “feliz de alcanzar una semifinal en mi torneo favorito” ya que este es un lugar “especial” para el tandilense. Es la tercera vez que alcanza una semifinal en el US Open, donde guarda un buen recuerdo de aquel 2009 en el que fue campeón derrotando nada más ni nada menos que a Roger Federer.

Sobre el partido aportó que fue “épico” por la forma en la que se dio y por las “pésimas condiciones climáticas”, ya que “es muy difícil jugar con esta temperatura”. Además, habló sobre el altercado en el segundo set con el umpire: "Me quería cambiar el short empapado pero el juez de silla me dijo que tenía que esperar el final del set, yo no tenía problema de cambiarme ahí mismo”.

“Al final estábamos muy cansados los dos. En el descanso de 10 minutos me bañé y me vende los pies, y cuando estaba acostado no quería volver. Ese tiempo en el vestuario te termina cansando en vez de activarte” expresó La Torre de Tandil ante el breve receso luego del tercer set debido a las reglas de calor extremo.

“Me salvé porque saqué muy bien en momentos importantes” fue la frase con la que Juan Martín definió su actuación en el partido. Y tiene razón, porque logró con su primer saque ganar el 85% de los puntos y un 77% con el segundo, lo cual es bastante alto. Además, alcanzó 21 juegos de servicio ganados, 0 perdidos y logró tres quiebres.

Se mostró tranquilo sobre quién será su próximo rival “primero quiero descansar en el hotel y disfrutar con mis amigos y la gente que está acá, después pensaré en Rafa o Thiem”.