La atención atraída desde la NBA por las últimas buenas temporadas del de Mahón podía provocar distracción en un inicio de la campaña con mayor presión y más determinante para los componentes del proyecto Pablo Laso. Tras dos años consecutivos llegando a la final de la Euroliga y peleando por la Liga, el cuarto intento de la idea de la sección del Real Madrid de Baloncesto se ponía a prueba. Y uno de los pilares en la estructura iba a realizar su mejor actuación desde que llegó a Madrid en 2007.
Rápidamente en el foco
Su único precedente a la institución blanca fue en La Bruixa d'Or Manresa primero en categoría ACB y más tarde en LEB. Pero poco le duró al conjunto manresano, ya que apareció el Real Madrid y se lo llevó con tan solo 19 años, para disputar el final de temporada, con un futuro esperanzador por delante. Ha visto pasar a entrenadores como Joan Plaza y Ettore Messina, aunque fue éste quién empezó a darle importancia en la rotación. Bajo la tutela de ambos tan solo ganó una Liga ACB en 2007 nada más llegar, pero el resto de temporadas acabaron vacías hasta la llegada del entrenador vitoriano.
Un potencial sin límite
La llegada de Pablo Laso supuso la titularidad para el jugador nacido en las Islas Baleares y conllevó un aumento significativo de la responsabilidad del ataque y la defensa del conjunto. En las primeras tres campañas bajo el nuevo estilo de juego creado consiguieron dos Supercopas de España, dos Copas del Rey de Baloncesto y una Liga ACB. En lo personal obtuvo una serie de galardones, entre los más importantes un MVP de la Copa del Rey de Baloncesto en 2012 y un Quinteto Ideal de la ACB en el mismo año. Pero la leyenda de "El aeroplano de Mahón" en la casa blanca no había hecho más que comenzar.
En el vestuario crearon una química envidiable con Felipe Reyes, Sergio Rodríguez, Rudy Fernández y Jaycee Carroll entre otros. Y gracias al compañerismo y al esfuerzo conjunto unido a los refuerzos anuales que se sumaban al barco merengue consiguieron llegar dos veces consecutivas a la final de la Euroliga y ganaron al eterno rival en la Liga ACB de 2013. Pero el mayor reto de uno de los mejores bases del viejo continente comenzaba con la Supercopa de España de 2014 frente al FC Barcelona.
Consagrarse para la historia
Comenzaron ganando esa Supercopa y no dejaron de hacerlo en los próximos nueve meses. Ése título, más tarde la Copa del Rey, más adelante la ansiada Euroliga, y por último hace unos días la final de la Liga Endesa. Un año inmejorable en el que era imposible exigirle más al 23 del conjunto blanco. Actuaciones estelares contra el FC Barcelona, triples increíbles contra Valencia Basket para dar el pase y llevar la batuta en la Final Four le han llevado a estar en el Quinteto Ideal de la ACB y a proclamarse MVP de la final de la Liga Endesa.
El principal artífice de una temporada buscado a lo largo de 40 años
Tras siete años en la capital la incertidumbre sobre su marcha a las américas sobrevuela el Palacio de los Deportes, pero desde luego la figura de Sergio Llull ya reside junto a nombres tan ilustres como Fernando Martín, Alberto Herreros o Louis Bullock, entre muchas leyendas.
