Barcelona Lassa e Iberostar Tenerife se enfrentaban para cerrar la undécima jornada de la Liga Endesa en el Palau Blaugrana. En las horas previas al encuentro saltaba la noticia de que Thomas Heurtel, base del conjunto catalán, sería baja por un golpe en el muslo y en su lugar entraría en la convocatoria el letón Rodions Kurucs.

En el cuadro visitante era noticia la vuelta de Javier Beirán al equipo tras haberse perdido varios partidos por lesión. También se debe adestacar el caluroso aplauso con que recibió la afición a Fran Vázquez, el pívot gallego jugó en el Barcelona y siempre es recibido con mucho cariño por los aficionados.

Los azulgrana no arrancaban

Arrancaba el partido en el Palau con varios intercambios de anotaciones y con un Tenerife que parecía aguantar las primeras embestidas de los azulgrana. Con el avance de los minutos el conjunto canario comenzó a coger la iniciativa del encuentro y, a base de una buena defensa, abrieron una brecha de ocho puntos.

Foto: Noelia Déniz
Foto: Noelia Déniz

Parecía que el club azulgrana había salido a pista con la misma actitud del viernes ante Fenerbahce, permitiendo gran cantidad de rebotes ofensivos y con poco acierto en ataque. Una acción de 2+1 de Abromaitis supuso una brecha de nueve puntos en el marcador que Sito Alonso trataba de acortar de forma inmediata.

El primer cuarto del encuentro cerraba con Tenerife venciendo por ocho puntos y dejando una imagen de superioridad sobre su rival. El equipo de Fotis Katsikaris había estado más acertado en el tiro y estaba poniendo una mayor intensidad al partido, dos factores determinantes hasta el momento.

Parecía que la baja de Heurtel estaba siendo más importante de lo esperado y el juego del equipo no terminaba de carburar. El juego interior no aportaba soluciones y Pressey comenzó a acusar el cansancio tras acumular todo el primer cuarto en pista.

Llega la esperada reacción

Sin embargo, la entrada del segundo cuarto pareció ser el renacer del club azulgrana y, con un parcial de 0-5 y una importante mejoría en defensa, se colocaban a tres puntos de su rival. Rakim Sanders estaba liderando la remontada de los suyos y, con nueve puntos, era el máximo anotador del partido.

Ese buen arranque de cuarto se complicó tras un parcial que ponía a Tenerife con una ventaja de ocho puntos, pero dos acciones rápidas volvieron a colocar a los azulgrana a solamente cuatro puntos de diferencia. Lo seguían intentando los de Sito Alonso, pero no lograban imponer su juego para darle la vuelta al partido y seguían siendo superados por un Tenerife que se estaba encontrando bastante cómodo en pista.

A falta de un minuto para terminar la primera mitad llegaría un triple de Navarro que colocaba a los suyos a dos puntos y, cuarenta segundos más tarde, un mate de Seraphin empataba el partido y obligaba a Katsikaris a pedir tiempo muerto.

Seraphin dio la primera ventaja tras el 2-0. Foto: Noelia Déniz
Seraphin dio la primera ventaja tras el 2-0. Foto: Noelia Déniz

Terminó la primera mitad con una canasta de Abromaitis para dejar a Tenerife venciendo por 36 a 38 en un partido que se había igualado en la recta final del segundo cuarto. Sanders lideraba a un Barcelona que estaba yendo de más a menos en un partido que no estaba sabiendo dominar. En el cuadro canario eran Pontika, Tobey y Abromaitis los protagonistas de la momentánea victoria canaria en el Palau.

Igualdad total en la segunda mitad

Arrancaba la segunda mitad y lo hacía con un Barcelona que rápidamente lograba su primera ventaja desde el 2-0 inicial con dos contraataques rápidos. El conjunto tinerfeño volvió a darle la vuelta al marcador con un parcial de 0-6 y el encuentro entró en una fase de intercambio de canastas que mantenía el encuentro igualado.

Ese intercambio se prolongó hasta la recta final del tercer cuarto, pero lo que parecía seguro era que el descanso había servido para que los de Sito Alonso saliesen a pista con un punto más de intensidad que les estaba permitiendo controlar el partido.

Ribas fue uno de los líderes del equipo. Foto: Noelia Déniz
Ribas fue uno de los líderes del equipo. Foto: Noelia Déniz

Llegaría el último cuarto con máxima igualdad en el marcador, los locales vencían por dos puntos y todo se debería resolver en el último cuarto. Sanders estaba siendo el mejor local con 22 de valoración, pero era Mateusz Ponitka, con 23 puntos, el que lideraba ese aspecto en el encuentro. 

El último cuarto daba inicio con un par de intercambios de canasta y una falta antideportiva que cometía el Barcelona que era bastante protestada por la afición. Los tinerfeños no pudieron aprovechar totalmente esa acción pero el encuentro se mantenía igualado.

Llegaron las malas noticias cuando, a falta de 6:20 para el final, Rakim Sanders abandonaba la pista cojeando y dejando muestras de dolor en su pierna derecha. Además, el americano acababa de cometer su quinta falta del encuentro y era eliminado del mismo. En la acción posterior Tenerife se puso un punto por encima y, con un Barça sin Sanders y Heurtel, el partido quedaba totalmente abierto para la recta final.

El final nos lleva a la prórroga

Un triple de Navarro era rápidamente contestado por un mate de Ponitka y, a falta de 2:34 para el final y con ambos equipos en bonus, estaba por decidirse el encuentro en una apasionante recta final. Dos tiros libres de Vasileiadis colocaban a los visitantes con una ventaja de un punto.

Vasileiadis pareció convertirse en el héroe de los suyos al anotar seis puntos seguidos que mantenían con vida al conjunto tinerfeño. Con 1:05 para el final el marcador era de 77-77 y con posesión para Tenerife. Hanga logró robar la pelota pero Navarro falló el triple que podría haber decidido el partido, Katsikaris pedía tiempo muerto y ya quedaban solamente 43 segundos.

Richotti y Pau Ribas tuvieron el tiro ganador en sus manos, pero ambos fallaron. Quedaban dos segundos para el final y Barcelona tenía la última pelota del encuentro. Una canasta terminaba el partido, un fallo lo mandaba a la prórroga. Trataron de sorprender con un pase de alley-oop a Seraphin, pero el francés no llegó a la pelota y el partido se iba a la prórroga.

Vasileiadis sostuvo a los suyos al final. Foto: Noelia Déniz
Vasileiadis sostuvo a los suyos al final

Los equipos afrontaban la prórroga en bonus y con jugadores importantes como Seraphin y Richotti cargados con cuatro faltas personales. Un triple de Vasileiadis colocaba a los suyos con una ventaja de un punto, pero Seraphin lo empataba tras anotar un tiro libre.

Un final de infarto que se decanta para Tenerife

Un nuevo triple de Ponitka, que ya llevaba 26 puntos, colocaba a los suyos con tres puntos de ventaja a tres minutos del final. El Barcelona logró empatar el encuentro, pero dos tiros libres de Richotti dejaron a Iberostar con dos puntos de ventaja a falta de 1:07. Hanga lo empataba pero en la jugada siguiente un triple de Vasileiadis dejaba el partido muy de cara para los de Katsikaris.

Navarro tiró de galones y experiencia para forzar tres tiros libres. El de Sant Feliu anotó los tres lanzamientos y volvió a igualar un partido que se podía hacia cualquier lado. Rodrigo San Miguel anotaba una canasta y Navarro volvía a disponer de dos tiros libres que volvió a anotar para empatar el encuentro.

Quedaban 7 segundos, todo estaba por decidir y esta vez era Tenerife el que tenía la pelota para terminar el partido o que se jugase una segunda prórroga. Rodrigo San Miguel recibió la pelota, encaró la canasta y anotó una bandeja que, con 1.5 segundos por jugar, parecía definitiva. Moerman intentó un tiro a la desesperada que no entró, Tenerife se hacía con la victoria y vencía por primera vez en el Palau Blaugrana.