Los playoffs de la Liga Endesa comenzaban con un duelo entre el primer y el octavo clasificado. El Iberostar Tenerife visitaba el WiZink Center e intentaría conseguir en el feudo madridista su primera victoria para volver al Santiago Martín de Tenerife con una victoria que les colocaría con ventaja en la eliminatoria y, además, a tan solo un partido de conseguir pasar, por primera vez en su historia, a unas semifinales de la Liga Endesa.
El Real Madrid llegaba a este partido tras conseguir su décima Euroliga en Belgrado ante el Fenerbahçe y con ganas de conseguir ese mismo resultado en los playoffs de la competición nacional y quitarse la espinita del año pasado, donde el Valencia Basket consiguió hacerse con el título liguero.
Pablo Laso ha contado en este partido con Dino Radoncic y Santiago Yusta, los dos canteranos que en los últimos meses y tras recuperar a los lesionados, apenas han contado en los planes del entrenador del Real Madrid.
Por su parte, el Iberostar Tenerife llegaba tras certificar su pase a la postemporada por segunda campaña consecutiva, pero sin conseguir las buenas sensaciones que conseguía la temporada pasada fuera de su pabellón. Además, el conjunto de Fotis Katsikaris ha perdido por lesión a Rodrigo San Miguel, uno de sus jugadores referentes y el que mejor dirigía la equipo. El jugador maño se perdería este partido por una lesión muscular en el gemelo y sería duda para el próximo partido de esta serie.
El Real Madrid vive del triple
El partido comenzó muy frío y sin mucho ritmo entre ambos equipos. Sin embargo, el Real Madrid golpeó primero con un parcial de salida de 11-0 fundamentado, sobre todo, en el acierto en el triple ante un Iberostar Tenerife que salió dormido y muy errático.
El equipo de Katsikaris consiguió la primera canasta en el minuto cinco de partido y, a partir de entonces, le endosó al equipo de Pablo Laso un parcial de 0-9 para estrechar la ventaja en el marcador de los locales.
El acierto en el triple del Madrid, que acabó el cuarto con un 5/11, les permitió estirar la ventaja en el electrónico y acabar los primeros diez minutos seis arriba.
Exhibición anotadora de Carroll
Jaycee Carroll fue el artífice de que los locales consiguieran la máxima renta en el marcador, estirándola hasta los 13 puntos, gracias a los 12 que el escolta americano anotó en este período. La buena defensa del equipo de Pablo Laso y los fallos en ataque de los visitantes hizo que no pudieran seguir el ritmo ofensivo del Real Madrid.
Sin embargo, esto cambió en los últimos minutos del cuarto, donde los visitantes con un parcial de 0-6 redujeron la ventaja en el marcador y se fueron siete puntos por debajo en el marcador.
Partido muy bronco
Los dos equipos mostraban poca intensidad sobre la pista y eso se reflejaba en el poco acierto que conseguían ambos en el acierto en el tiro tanto de dos como de tres. Pese a esto, el Real Madrid parecía exhibir una marcha más, que usó para despegarse levemente en el marcador hasta los dobles dígitos.
El Iberostar Tenerife lo intentaba, pero no conseguía acercarse debido a su poco acierto en el tiro ya que al final de este período firmaba un pobre 39% de acierto.
Iberostar Tenerife no deja de luchar
El equipo isleño se encontraba haciendo la goma durante todo el encuentro y las diferencias en el marcador oscilaban en torno a los 10 puntos, pero el Iberostar Tenerife no había dicho su última palabra.
Los múltiples intentos del equipo de Fotis Katsikaris hicieron que su equipo se pusiera a tan solo cinco puntos y amenazara la victoria del Real Madrid. Sin embargo, el equipo de Pablo Laso aseguró la victoria y que sus rivales no les robasen el factor cancha.