Empezaba la temporada 2014-15 y el entrenador italiano, Marco Crespi, era el encargado de entrenar a los patateros. Venía de hacer una buena temporada en su país natal, sin embargo, no acabó de amoldarse al club vasco y tuvo que hacer las maletas en noviembre por su mal comienzo de campaña. Dejaba al Baskonia en una situación muy delicada, e Ibon Navarro sería el nuevo técnico para los vitorianos. Con el 'coach' vasco, realmente se notó un cambio, no obstante, una pequeña modificación que, al final, no alcanzó la "transformación" en su significado amplio. Para buscar un ejemplo así hay que avanzar un poco en el tiempo.

Crespi no duró ni tres meses en el Baskonia

Revolución. Tal y como define la RAE "Cambio rápido y profundo en cualquier cosa". La palabra clave que resume el cambio drástico del Baskonia en el verano de 2015. El conjunto gasteiztarra cambió, y además, de qué manera... De repente, se vieron luces al final del túnel, en un hoyo que no parecía tener salida. ¿Culpables? Muchos.

"Peras"; nueva plantilla, nuevos métodos, nuevos resultados

El técnico croata fue a la capital alavesa con las cosas claras, con la idea de sacarle a cada jugador todo su jugo. El trabajo y el sacrificio como forma de vida, y este último fue la tecla que dinamitó todo el potencial que contenía la 'bomba' Baskonia. Jugadores infravalorados pero de enorme calidad, que el 'coach' Perasovic supo cómo encajarlos en su equipo. En la competición doméstica, pasaron de un 19-15 en la temporada anterior a un 24-10 con el nuevo técnico. De estar sin Copa Del Rey a llegar a semifinales. De quedar en cuartos de final, a semifinales en los Playoffs de la Liga Endesa. Y, el más importante y destacado, la clasificación a la Final Four de Berlín sin la presencia allí desde el 2008.

¿De dónde surgía la corriente eléctrica del Baskonia?

Principalmente la contenían los dos 'playmakers' norteamericanos: Darius Adams y Mike James. Perasovic decidió no atarlos corto -sobre todo a Adams- y dejarlos sueltos con mucha libertad sobre una cancha de baloncesto, y, al final, dicha decisión dio sus frutos. Los dos aún no siendo grandes directores de juego a la hora de generar ventajas para sus compañeros, el 'coach' croata acertó creando un Baskonia con más similitudes al juego NBA, es decir, con más posesiones en los partidos, un equipo más físico con capacidad de correr al contragolpe...

Adams y James ayúdandose mutuamente | Imagen: Baskonia
Adams y James ayudándose mutuamente | Imagen: Baskonia

De esta manera, el 'francotirador' de Illinois y el 'base saltarín' del Baskonia mejoraron prácticamente en todas sus estadísticas. El de Oregon llegó a anotar 10 puntos y repartir casi 3 asistencias para 10 créditos de valoración con unos porcentajes muy buenos (52% en tiros de dos y 88% en tiros libres). Sin embargo, quién más destacó entre los dos la pasada campaña fue Adams.

El norteamericano venía de hacer una irregular campaña a las órdenes de Ibon. Al principio, Josean Querejeta (presidente del Baskonia) decidió no renovarlo e intentar fichar otro base durante el verano pero no fue posible. Al final, Darius acabó renovando con el club alavés mostrando una metamorfosis completa.

Adams pasó de promediar 10 puntos a anotar 17'25 en apenas un año

El 'point guard' promedió en la Liga Endesa nada menos que 17.25 puntos (máximo anotador de la competición), 2.8 rebotes, 1.3 asistencias, 3 pérdidas y 1.3 robos para 13.7 créditos de valoración. Además, sus 98 triples anotados con un 39% de acierto desde el perímetro le hizo merecedor del premio al mejor triplista ACB. Asimismo, también fue galardonado como mejor base de la Liga Endesa 2015/2016, formando parte de su primer quinteto ideal.

Los todoterrenos con matrícula vitoriana

Para dar continuidad a la electricidad creada por los dos bases, Perasovic necesitaba un bloque sólido, y ahí encontró cuatro jugadores fundamentales durante el transcurso de la temporada: Hanga, Shengelia, Tillie y Blazic. A los tres primeros ya se les puede llamar 'veteranos' de la plantilla, ya que en el club de Zurbano no resulta fácil encontrar en los últimos años jugadores con más de tres temporadas en Vitoria, aunque realmente Hanga estuvo cedido en Italia durante un año.

'Toko' no tuvo la campaña soñada a nivel personal debido a sus dos lesiones en el menisco que le tuvieron parado más de la mitad de los encuentros. No obstante, fue uno de los líderes en el apartado ofensivo para el Baskonia con más de 10 puntos por partido.

En torno a Tillie, el francés nunca ha sido un jugador que destaca por sus impresionantes números, pero sí por su importancia en la plantilla. A la hora de crear un equipo se necesita una variedad de jugadores, que cada uno aporte lo suyo a su máximo nivel, y a este cóctel le era imprescindible un luchador como el galo.

En cuanto a Blazic, un obseso con la defensa, fue pieza clave en las labores defensivas. 'El perro de presa' siempre se deja la piel sobre el parqué y nunca para de 'morder' al atacante contrario con el fin de conseguir un tiro malo o recuperar el esférico. Al igual que Tillie, un jugador que actúa en silencio y a pesar de que muchos de sus esfuerzos no aparecen en las estadísticas, nunca son en vano.

Blazic, siempre intenso | Imagen: Baskonia
Blazic, siempre intenso | Imagen: Baskonia

'El húngaro volador', dueño y señor del 'coast to coast'

Por último, y el quizás jugador más desequilibrante y necesario en ambas partes de la pista del roster baskonista: Adam Hanga. El alero baskonista, maneja el 'Coast to coast' -recorrer con el balón toda la pista para acabar la jugada con una canasta- a mil maravillas y el año pasado lo hizo en prácticamente todos los partidos. Capaz de defender a hombres más bajos que él y coger las riendas del partido en el puesto de base. Polivalente como una navaja suiza, y al término de la temporada estos fueron sus números en la competición nacional: 9.1 puntos, 4 rebotes y 1.6 asistencias.

Don Ioannis Bourousis

Probablemente el jugador que más impacto ha creado en solamente una temporada en toda la historia del Baskonia. Un entrenador en la cancha, un dominador absoluto de la zona y un líder en la plantilla. A falta de la creatividad de los dos bases en la fluidez del juego, el griego actuaba como el cerebro baskonista. Promedió 12,9 puntos (57% de dos, 41% de tres y 88% en tiros libres), 7,1 rebotes y 2,2 asistencias para 18,9 créditos de valoración en la Liga Endesa, y cómo no nombrado MVP de la temporada. El de Karditsa también sufrió una increíble metamorfosis al igual que su equipo. Evolucionó de una forma irreal, de agitar la toalla en su antiguo club, el Real Madrid, a ser admirado e idolatrado en Vitoria mientras tenía todos los focos puestos en él.

Resumiendo, del banquillo al estrellato.

-Temporada 2013-14: 7 puntos (24% en triples), 4 rebotes y menos de una asistencia para 9 de valoración en 19 minutos.

-Temporada 2014-15: 5 puntos (33% en triples), 4 rebotes y una asistencia para 6 de valoración en 15 minutos.

-Temporada 2015-16: 12.9 puntos (41% en triples), 7 rebotes, 2.25 asistencias para 18.9 de valoración en 23 minutos.

Resumen de la temporada; volvió el carácter

Fue una campaña histórica, esas temporadas que fácilmente se sueñan y difícilmente se alcanzan. Los años de oro de la entidad de Zurbano estaban acabados o por lo menos bien escondidos en el desván. El afamado 'Carácter Baskonia' ya no tenía tanto protagonismo en la prensa y parecía que se iba a olvidar con el paso del tiempo.

Sin embargo, regresó.

Regresó de la mejor manera posible. Desafortunadamente sin títulos, pero creando nuevamente la ilusión. El año 2016 siempre será recordado, a pesar de que colectivamente no alzaran ningún galardón.

Copa del Rey; la quinta de Llull

Como están acostumbrados los aficionados del deporte de la canasta, llegaba febrero y esto es sinónimo de la Copa del Rey. Al conjunto de Perasovic le tocó enfrentarse al anfitrión del torneo del 'K.O.', Rio Natura Monbus. Fue un partido reñido que acabó en 77-79 en el electrónico a favor de los alaveses gracias a una gran actuación de Causeur con 19 puntos y Hanga con 20 puntos, seis triples incluidos.

En las semifinales le esperaba el Real Madrid, y Baskonia cayó en los instantes finales por 80-86. Los ocho puntos casi consecutivos de Llull decidieron el encuentro, y además este día el base español fue protagonista por dos razones: por su actuación anotadora con 15 puntos, y la quinta falta no pitada. El 'aeroplano de Mahón' estuvo gran parte del último cuarto con cuatro faltas personales y aunque en muchas situaciones estuvo a punto de rozar la quinta y en consecuencia la expulsión, al final su presencia sobre el parqué resultó clave para que su conjunto consiguiera el billete para la final.

Llull penetrando a canasta ante Diop | Foto: ACB.com
Llull penetrando a canasta ante Diop | Foto: ACB.com

Euroliga; el Top 16 y el 'Oakazo'

Es difícil elegir el mejor momento de forma del Baskonia pero sin ninguna duda dos se sobresalen entre los demás. Ambos en la máxima competición continental: en el Top 16 y Top 8.

Baskonia consiguió pasar en el tercer puesto al Top 16 tras quedar detrás del Olympiacos y Efes. Una vez pasados, les tocaron el 'grupo de la muerte' en el Top 16, formado por Olympiacos, Barcelona, Brose Bamberg, Real Madrid, CSKA Moscú, Khimki, Zalgiris y Baskonia. Aun así tiraron de la épica y lograron la clasificación pasando de ronda ¡en el segundo puesto! Crearon un fortín en el Buesa y solo cayeron una vez en su estadio. Tumbaron al Real Madrid y Barcelona en su casa y doblegaron al después campeón de Europa CSKA Moscú. Probablemente es el grupo más difícil que se haya visto en la historia de la competición continental pero los vascos siguieron adelante para enfrentarse al Panathinaikos.

En el Top 8 más de lo mismo.

Se tuvieron que enfrentar en los cuartos de final de la Euroliga contra los helenos en una serie al mejor de cinco partidos, no obstante, con tres les bastaron. Primero, le ganaron dos partidos en el Buesa para ponerse 2-0 en el cómputo global y luego vino lo mejor en el tercero. Un Baskonia repleto de bajas -sin Shengelia, Causeur ni Hanga- revivió el mítico 'Oakazo' diez años después, dando un golpe de autoridad sobre la mesa. Pasando por encima de los atenienses por 75-84 y siendo liderados por los 'playmakers': Adams con 24 puntos y James con 20. Después de la hazaña de Atenas, ponían rumbo a la Final Four de Berlín para enfrentarse al todopoderoso Fenerbahce de Zeljko Obradovic.

Resumen del 'Oakazo'. Vía (Pasión Basket)

Final Four de Berlín; el aro lo escupió

Baskonia no tenía presencia en una Final Four desde el 2008, así que la de Berlín era algo especial y poco esperada por la afición vasca. El club de Zurbano se midió al Fenerbahce, pero no lograron pasar de ronda en la prórroga, siendo derrotados por 88-77. Baskonia siempre recordará esta Final Four por el triple errado de Darius Adams y la posterior técnica no pitada a Obradovic. Aparte de que los azulgranas no acabaran contentos con la actuación del partido de los colegiados, estos últimos segundos fueron claves para que los vascos vieran la otra cara de la moneda. El ex entrenador y ahora comentarista de Movistar +, resumió a la perfección la última jugada que condenó al Baskonia.

La última jugada por Piti hurtado. Vía: Kia en Zona

Liga Endesa; temporada demasiada larga

Con un récord de 24-10 los patateros pasaron en la cuarta posición para verse las caras con el Herbalife Gran Canaria en Playoffs. Se enfrentaron en una eliminatoria al mejor de tres y el conjunto dirigido por Aíto tuvo que rendirse en el último partido para que los de Perasovic siguiesen rumbo a las semifinales. Allí se encontraron al Barcelona de Pascual y en esta serie fue el cansancio físico y psíquico quien acabó de rematar a los alaveses. Baskonia ya no demostró su nivel alcanzado durante la temporada tras el batacazo de Berlín y fueron derrotados por 3-1 ante los culés. No obstante, hubo un momento inolvidable en esta eliminatoria: la canasta de Bourousis a pase de Hanga.

Tras una espectacular bandeja de Satoransky al final del tercer partido en el Buesa Arena, parecía que el encuentro y la eliminatoria caerían al lado de los visitantes, pero no fue así. Faltaban nueve décimas para concluir el partido y Hanga era el responsable de sacar de banda. Este, cuando no podía hacer un pase corto para los 'points guards' alzó la mirada y decidió cambiarse de oficio. De repente se puso la vestimenta de jugador de fútbol americano y actuó de 'quarterback'. Vio a Bourousis situado en la canasta contraria y decidió pasarle. El griego lo cogió en el aire, cayó sobre una pierna y se levantó para acabarlo a una mano. Simplemente increíble.

Vía: ACB

El naufragio azulgrana

La huida de los jugadores baskonistas empezó nada más finalizar la campaña de ensueño. 8 de 13 jugadores de la pasada campaña -también el entrenador- decidieron huir a otros equipos en busca de minutos como lo hicieron Planinic, Mamadou y Corbacho. Otros a por nuevas experiencias como Adams, James, Causeur, Bertans y Bourousis. Fue un palo duro pero no una nueva situación para el presidente del Baskonia, Josean Querejeta. El alavés está acostumbrado a controlar estas situaciones y él no naufragó.

Nueva maquinaria

Querejeta fichó tres jugadores de la NBA, incluido el número uno del Draft del 2006 Andrea Bargnani. Los otros dos fueron Larkin, base explosivo y sabio en las situaciones de 1vs1, y Beaubois, tirador desde la larga distancia y experto en fintas de tiro. Luego también contrató a Rafa Luz, Johannes Voigtmann y Trevor Cooney. El brasileño vino con la idea de mejorar en defensa y bajar el ritmo del encuentro, el alemán para dar descanso a la estrella Bargnani y el americano para abrir el campo y ejecutar de tres.

Temporada ilusionante, con un Baskonia que ilusiona

Después de una pretemporada repleta de bajas y una Supercopa sin tiempo de preparla como es debido, entrábamos en el mes de octubre cuando los pabellones de varias regiones de España preparaban el primer encuentro de la Liga Endesa. El Baskonia de Sito Alonso viajaba hasta Galicia para enfrentarse al Rio Natura Monbus Obradoiro, para comenzar una temporada que se presentaba muy ilusionante al inicio de ella, con un Baskonia que cómo no, también ilusionaba y sigue ilusionando.

Shane Larkin ¡desatado!

El baskonismo esperaba ansioso el primer encuentro de liga, tanto para ver cómo iba a funcionar el equipo ante las múltiples altas y bajas sufridas durante el verano, como para ver los destellos de calidad que podían dejar los Larkin, Bargnani, Voigtmann o el joven Sedekerskis. Ninguno de ellos defraudó, pero es necesario hacer el seguimiento del playmaker estadounidense.

Imagen: Baskonia
Imagen: Baskonia

Shane Larkin se ha echado el equipo a la espalda. Larkin llegó al Baskonia para cubrir una posición en la cual Darius Adams y Mike James hicieron maravillas durante la pasada temporada, lo cual hizo que el listón quedara muy alto. Pero al de Cincinnati le gustan los retos y es eso lo que está siendo esta temporada para él. Se ha echado el equipo a la espalda y con actuaciones y jugadas espectaculares se está empezando a ganar al respetable. Pocos bases europeos pueden seguir su ritmo en el uno contra uno y su arrancada puede ser letal para la defensa contraria. El equipo nota cuándo tiene un buen día y cuándo no.

Rafa Luz, la otra cara de la moneda

El base brasileño Rafa Luz está jugando a la sombra de Larkin. Tal y como se esperaba, todos los focos se están centrando en el norteamericano, por lo que el ex jugador del Obradoiro cumple el rol de segundo base, dando descanso a Larkin, calmando el partido y dando ese plus en defensa.

Sí, ha llegado Rodrigue

Prometía, y mucho, el jugador francés en pretemporada. Con actuaciones que sobresalían del resto y dejando destellos de la calidad que le hizo disputar la NBA con el Dallas Mavericks. Pero una desafortunada lesión hizo que Beaubois no fuera capaz de debutar como baskonista hasta la sexta jornada, en la que el Baskonia cayó frente al Unicaja. Los 12 puntos que aportó el francés no valieron para conseguir la victoria, pero sí para ganar confianza y ser uno de los hombres más importantes en el roster de Sito Alonso.

Otro de los ex NBA y tirador que fichó Josean Querejeta fue Chase Budinger, pero el californiano no ha conseguido demostrar su valía en el conjunto de la capital vasca, por ahora.

Juego interior de garantías

Ante la baja de Bourousis, parecía imposible tapar los agujeros que dejó el griego. Entonces Querejeta, a quien podemos catalogar como experto en estas situaciones, metió mano en el mercado y con las incorporaciones de Andrea Bargnani y Johannes Voigtamnn, más las aportaciones de Ilimane Diop, dio por cerrada la posición de center . Pero las malas noticias llegaron al cuadro baskonista, y es que quien iba a ser la 'viga maestra' del proyecto de Querejeta cayó lesionado y no ha podido recuperarse del todo todavía. Aun así, los anteriormente nombrados Johannes Voigtmann e Ilimane Diop dieron un paso al frente y se repartieron los papeles de cinco. El alemán, tras varios encuentros siendo quien dirigía al equipo hacia la victoria con solidez defensiva y efectividad en ataque, ha sufrido una bajada de nivel en el último mes. Es lo que ha aprovechado Diop para hacerse notar, y siendo un dolor de cabeza constante para los pivot contrarios ha empezado a ganarse la confianza del míster.

Bargnani ha dejado muchas dudas hasta ahora | Imagen: Baskonia
Bargnani ha dejado muchas dudas hasta ahora | Imagen: Baskonia

Johannes Voigtmann e Ilimane Diop dieron un paso al frente

Pero si esto fuera poco, uno de los jugadores que más echó en falta el Baskonia la temporada pasada ha vuelto con las pilas muy cargadas. Shengelia se ha convertio en un referente en el vestuario, además de ser un dominador de la pintura. Al ser uno de los "veteranos" de la plantilla, el georgiano ha recobrado la confianza y ejerce de uno de los líderes del vestuario.

Una nueva era, un nuevo Baskonia

Daba comienzo una nueva era de la Euroleague con grandes cambios tanto en lo deportivo como en lo económico. Todos contra todos, y una gran ayuda económica para el Baskonia, no suena mal. En realidad, teniendo en cuenta el número de encuentros que se iban a disputar a lo largo de la temporada, competir con los equipos que poseen un presupuesto mucho mayor que el de los patateros, al igual que un roster mucho más amplio, se presentaba muy difícil. Pero hay una cosa que va más allá del dinero y grandes jugadores, eso que los otros equipos no tienen, eso que se llama el "Carácter Baskonia".

14 de octubre, comienza la Euroleague y que mejor manera que en el Buesa Arena y frente al ex baskonista Velimir Perasovic. Primer partido de la temporada y ya tocaba demostrar lo que el equipo era capaz de dar en casa. Un encuentro igualado en todo momento, se decantó para el lado azulgrana después de que Bryce Cotton fallara el último tiro. 1-0 en el balance de victorias-derrotas.

La irregularidad llegó al Baskonia

Los de Sito Alonso encadenaron varias jornadas alternando la victoria y la derrota, lo que hizo que el equipo entrara en una irregularidad que duró ocho jornadas. Parece ser que la derrota sufrida frente al vigente campeón de la Euroleague fue un golpe sobre la mesa e hizo que el Baskonia espabilara.

Baskonia, un grupo unido | Imagen: Baskonia
Baskonia, un grupo unido | Imagen: Baskonia

Tras la tempestad, llegó la calma

Sí, es verdad, el Baskonia no ha sufrido una situación dramática en lo que va de temporada. Pero la situación de después del partido frente al CSKA era totalmente adversa a la anterior. De vuelta al Buesa Arena, el Baskonia recibía al Galatasaray, y tras el triunfo, llegaron tres más de manera consecutiva. De los últimos cinco encuentros de la Euroleague cuatro han terminado con victoria baskonista; y es que ni el Darussafaka Dogus, ni el Unics Kazan, ni el FC Barcelona Lassa han podido doblegar al conunto de Sito Alonso. El único equipo que salió airoso del encuentro frente al conjunto vitoriano fue el Panathinaikos de Bourousis y James. El encuentro en el mítico OAKA terminó con un 69-68 en el electrónico. Dadas las circunstancias, podemos decir que el Baskonia se ha convertido un hueso duro de roer en el panorama europeo.