Vuelta a la competición doméstica, con un Madrid que tiene la cabeza en la Euroliga (lo está pasando mal ante el Fenerbahçe), pero no ha podido posponer partidos en la competición doméstica. Enfrente un Joventut en la parte media de la tabla y con ganas de pisar el acelerador y meterse en playoffs. Comienzo del encuentro con los blancos volcando juego a la pintura. Tanto Reyes como Ayón veían aro y se entendían a la perfección en el pick&roll interior. Ello, fomentado por los puntos en la media distancia de Rivers propiciaron un parcial inicial de 9-2. Duelo de mates ente Rudy y Drame.
Primeros cambios en pista. Por los blancos se refrescaba el juego interior. Nocioni salía a pista por Reyes, y el canchero de Santa Fé lo hacia para enchufar desde el perímetro. Salva Maldonado también movía a su plantilla, pero los madridistas tenían el dominio del duelo. Rudy volvía a conectar otro misil desde el 6.75 y la ventaja se alargaba al +8. Tiempo muerto verdinegro. La roca Rakovic mantenía a la Penya en el duelo, pero los merengues seguían haciendo sangre desde la larga distancia. Tras el trilple de Carrol el primer cuarto culminó 25-13.
Zarpazo blanco
El segundo parcial amanecía con 0-5 de los badaloneses y Brandon Paul estrenando su casillero. Ello, sumado al enorme trabajo interior de Rakovic, limaba las diferencias. Pero los blancos tenían su día desde el perímetro, y Maciulis se sumaba a la fiesta. Los dos equipos medían mejor cada uno de sus ataques y las defensas se mostraban más ajustadas. Albert Miralles reforzaba la zona verdinegra, mientras que Paul encontraba aro desde el triple. Por los madridistas entraba a pista Sergio Rodríguez, que siempre gusta de acelerar el partido.
Pese a la paridad en las marcas, los de Laso practicaban con frecuencia el pase extra para encontrar a algún hombre solo. Cuando se trata de cañoneros de élite como Carroll significa muerte segura. A base de cañonazos la ventaja se ampliaba a un preocupante +14 y nuevo tiempo muerto del Joventut. Más cambios en el duelo, Laso más que consciente de la enorme carga de sus pupilos rotaba cual poseso. Minutos para Willy Hernángomez. Reaccionaron los catalanes con los puntos consecutivos de Mallet y Abalde. El triple sobre la esquina del capitán Reyes sellaba la primera mitad con 51-32. Un lapidario +19 para los capitalinos.
Joventut da la cara
Comienzo de la segunda parte con repetición de las mismas jugadas. Ayón y Reyes seguían produciendo puntos en la pintura, y encontrándose con facilidad. Debido a la enorme diferencia a favor de los blancos, estos bajaron la intensidad en las marcas, y el Joventut podía encontrar canastas más liberadas como la bandeja de Rakovic o el mate de Drame. El triple de Demond Mallet desde ocho metros despertaba la Penya, pero era tan solo el segundo en todo el encuentro., mostrando que estaban ciegos en su mejor arma. Entraba a pista Nocioni para aportar más intensidad a un Madrid medio dormido.
El partido transcurría muy rápido. Los dos conjuntos gustan de las transiciones sin descanso, pero sumado a la enorme ventaja cosechada por los merengues, aceleraba el asunto. Buen triple de Rudy Fernández y canasta a tabla de Ayón desatascando el marcador local. El Joventut respondía con canastas de Mallet y Brandon Paul. Rivers daba el susto con un problema en el tobillo, aunque no parecía grave pero visitaba el banquillo. El triple de Nocini frenaba toda reacción rival. Final del disputado tercer cuarto con 70-56.
Final y protagonistas
La Penya seguía limando la ventaja a base de trabajo, y se ponían a tan sólo diez puntos. Pero a la mínima distracción aparecían los killers blancos. Un ejemplo era Jaycee Carroll, que enchufaba liberado desde la esquina. La anotación se frenó de manera drástica, con mucho errores en los tiros por ambos bandos. El Madrid llegaba al bonus de personales de manera prematura, por lo que el Joventut se lucraba desde la línea de libres. Muy atascado el Madrid en ataque y los verdinegros acercándose en el electrónico, pero se les quedó corto el partido. Victoria merengue 91-77, que sigue 3º en la tabla.
Destacar el gran partido de Jaycee Carroll (15 puntos, 5/8 en triples) y de Rudy Fernández (14 puntos, cinco rebotes, 4/5 en triples). Ambos fueron un castigo ejemplar para los badaloneses desde el perímetro. En segundo plano Sergio Rodríguez (10 puntos, seis asistencias), que el tiempo que estuvo en pista movió al juego a su antojo.
Por el Joventut nombrar a Milovan Rakovic (13 puntos, 6/7 en tiros de dos). El serbio es una auténtica roca en la pintura, con un físico portentoso al que sumó acierto acierto en los tiros de corta distancia. El africano Ousmane Drame (17 puntos, cuatro rebotes, 6/8 en tiros de dos), le secundó en esa faceta dura pero constructiva de dar cera en la pintura.