Pablo Laso y Luka Doncic atendieron a los medios de comunicación después del partido entre el Real Madrid y Zalgiris Kaunas. Pablo se mostró contento con lo que demostraron en cancha, pero decidió calificar el encuentro como algo "raro". Pablo Laso cumplió en el encuentro ante el Zalgiris Kaunas 400 partidos al frente del equipo de baloncesto. El técnico, que llegó al conjunto blanco, al inicio de la temporada 2011/12, celebró esa cifra redonda con la octava victoria de la campaña en la Euroliga y la que supone su 311 en el banquillo madridista.
Los números de Laso son: Liga (232), Euroliga (144), Copa del Rey (13), Supercopa (nueve) e Intercontinental (dos). En las cinco temporadas (sexta la actual) como entrenador de la sección, Pablo Laso ha conseguido levantar 12 títulos con el Real Madrid: una Euroliga, tres Ligas, cuatro Copas del Rey, tres Supercopas y una Copa Intercontinental. Estas fueron sus sensaciones después del partido: "El partido ha sido extraño ya que hemos vencido por 40 puntos en la valoración y, sin embargo, hemos tenido que competir hasta el último segundo para conseguir la victoria. Al final, hemos mantenido la cabeza fría y nos hemos podido llevar el triunfo".
A Laso le chocó especialmente la diferencia en la valoración entre un equipo y otro: "La valoración final del Madrid es de 124 y la del Zalgiris, 84. Cuarenta de diferencia y tenemos la sensación de un partido muy igualado. Hemos hecho muchas cosas bien, de hecho hemos ganado el partido, pero hemos sido castigados por muchos errores, por la lectura del partido en el uno contra uno, por balones que se nos escapan y nos meten un triple...".
A la pregunta de VAVEL.com sobre Luka Doncic contesto lo siguiente: "De Doncic llamarán la atención esos dos triples que metió al final, pero ha ayudado al equipo en la dirección, en los rebotes y en la defensa. De Maciulis solo puedo decir que ha estado muy bien en ataque y en defensa. Ya sabíamos que iba a ser protagonista porque el juego del Zalgiris se adapta muy bien a sus características”.
La victoria se quedó en casa y el Real Madrid sigue aguantando el ritmo marcado por el Fenerbahce y el CSKA de Moscú. Pero esto no para y el Real Madrid ya baja a Bilbao con la casi segura baja de Sergio Llull.