Partido muy competido entre dos equipos de distinta conferencia pero con situaciones bastante parecidas. Dos conjuntos que se encuentran en posición de Playoffs pero teniendo muy de cerca a sus perseguidores ya que su récord de victorias actual apenas supera el 50%. Sin embargo, en el American Airlines Center se pudieron ver dos equipos totalmente diferentes. Uno apoyado en su jugador estrella (Dirk Nowitzki) y otro basado en el juego colectivo y el remar todos igual hacia la misma dirección.
Partido muy igualado desde el principio
Desde el salto inicial ambos conjuntos demostraron que iban a vender cara su piel y ninguno concedió al rival excesivas ventajas. La primera distancia importante la iban a coger los visitantes llegando a colocarse 10-2 tras una gran canasta del rookie Myles Turner bien asistido por Paul George. Entonces empezó la sucesión de hechos que serían la consigna del resto del encuentro. Chandler Parsons ponía a su equipo a tan solo un punto (15-16) gracias a un triple. David Lee fue un gran aporte para los de Rick Carlisle en el aspecto defensivo atrapando los balones en las dos canastas. La igualdad continuaba reinando y de igual forma que los de Frank Vogel cogían la ventaja con el 17-22, los locales la igualaban para terminar el primer cuarto a tres puntos de distancia (gracias a una canasta de un trabajador Lee).
El segundo cuarto siguió con la tónica de los anteriores doce minutos y repartió igualdad por doquier. Al principio los dos equipos se mostraron algo más fallones teniendo en cuenta lo que estaba por venir. Un parcial de 8-2 hacía que los Mavericks se pusieran delante en el marcador. Una ventaja que iba a afianzar algo más el pívot Zaza Pachulia anotando el punto 42 de su equipo tras capturar un rebote ofensivo. Pero, ya se sabe, en este partido la protagonista era la igualdad y se volvía a imponer, esta vez en favor de los Pacers que con un parcial de 8-0, coronado con un gran mate de Mahinmi asistido por Stuckey, conseguían darle la vuelta a la situación. Los pívots fueron una gran ayuda para los visitantes que también vieron con Myles Turner anotaba un triple importante que daba a su equipo una ventaja de seis puntos. Monta Ellis también anotó casi sobre la bocina para poner en el marcador el 51-55 con el que se llegó al descanso.
Nowitzki contra el mundo y gana el mundo
Partidos de este guión se suelen decidir en los mínimos detalles, pequeñas decisiones y aportaciones que terminan resultando clave. Fueron esa serie de cosas las que le faltaron a los Dallas Mavericks, o mejor dicho, fue lo que le faltó a Dirk Nowitzki. El alero alemán se vio por instantes sólo haciendo él mismo intentonas en solitario para tratar de alcanzar a su rival. El resto del equipo no se puede decir que estuviera mal (Matthews terminó con una buena hoja estadística), simplemente no dieron el nivel requerido en una noche de este estilo.
La igualdad se hacía más grande en el tercer cuarto, con menos ventajas y de menos puntos, pero siempre había un equipo que sabía manejar la situación: Indiana Pacers. Los de Frank Vogel hicieron un gran uso del juego colectivo (siete jugadores en dobles dígitos) que les terminó dando puntos extra sobre su rival, decisivos a la larga. De nuevo los Pacers llegaban a una ventaja gracias esta vez a un triple de Paul George que ponía el 72-83 en el marcador (máxima ventaja en el partido). El descanso, no prologando pero existente y necesario, de Dirk Nowitzki también supuso un factor más contra el que luchar por parte de los jugadores de la franquicia propiedad de Mark Cuban.
El último cuarto mantuvo a jugadores y seguidores del encuentro concentrados en lo que estaba ocurriendo en la cancha ya que los locales no se daban por vencidos y era el propio Nowiztki quien conseguía a través de un gran triple colocar a su equipo a tres puntos (80-83) a falta de tan sólo diez minutos para terminar el choque. Esta no fue la parte más interesante ya que a poco más de cinco minutos para concluir de manera definitiva los locales imponían el 91-92 en el marcador reduciendo a uno la distancia que separaba a los dos rivales por la victoria. En ese momento fue donde se pudieron apreciar de formas más clara las virtudes y defectos de un equipo y otro que decantaron la balanza en favor del vencedor. Tres triples casi seguidos de George Hill reducían toda esperanza local por culminar la remontada y llevarse la victoria. El alemán intentó por varios medios evitar la quinta derrota consecutiva de su equipo pero el esfuerzo fue en balde.
Los Pacers no fallaron en los tiros libres finales y tampoco defraudaron al conseguir que siete de sus jugadores llegaran a dobles dígitos. Los Mavericks, por su parte, se encuentran en una mala racha de cinco partidos sin conocer la victoria y llega el momento de buscar una reacción bien sea a través de una reestructuración del equipo de cara a la temporada que viene o jugar con lo que se tiene puliendo algunas cosas que quedan por mejorar.
Importante victoria que sin ser definitiva acerca un poco más a los Pacers a asegurarse los Playoffs y aleja un poco más a los Mavericks de las buenas sensaciones y el asentamiento en el octavo lugar de la clasificación de la Conferencia Oeste.