El año 2017 de Houston Rockets ha estado marcado por el optimismo. Si algo le ha servido el 2017 a Houston es para saber a que juega el equipo. Los tejanos han entendido a la perfección la idea de juego que D'Antoni ha querido trasmitir al equipo. Con Harden como gran aglutinador de balón en los ataques del equipo, los Rockets han practicado uno de los baloncestos más alegres de la liga. Las transiciones rápidas y el triple se han convertido en la seña de identidad de un equipo que sueña con llegar, al final de esta temporada, a las finales de la NBA.

El record durante el año natural de 2017 es de  54 victorias por 24 derrotas (sin contabilizar partidos de playoffs), un 70% de victorias, uno de los mejores equipos del año. Pero si el final de la temporada pasada fue esperanzador para los sureños, el inicio de esta temporada ha sido muchísimo mejor, actualmente poseen el mejor record de la liga. Solo han cedido siete derrotas en lo que llevamos de curso, y comparten la primera posición de la Conferencia Oeste junto a Golden State Warriors, a los que vencieron en el encuentro inaugural de la temporada, único partido que han disputado entre estos dos equipos esta temporada.

Llegada de Chris Paul

Si algo ha sido el detonante del salto de calidad del equipo en estos primeros tres meses de temporada ha sido la incorporación al equipo de uno de los mejores playmaker de la liga, Chris Paul. Con CP3 el record del equipo es de 15 victorias y tan solo una derrota. Con Paul el equipo juega más ordenado en ataque, y la estrella, James Harden, mejora sus porcentajes de tiro, así como todas sus estadísticas (puntos, rebotes, porcentajes de tiro, tapones y robos) a excepción de las asistencias, algo entendible ya que Paul es un base puro. 

Chris Paul les está dando a los Rockets el salto cualitativo que necesitaban | Fotografía: Christian Petersen / Getty Images
Chris Paul les está dando a los Rockets el salto cualitativo que necesitaban | Fotografía: Christian Petersen / Getty Images

Además, a nivel individual, CP3 está luciendo como la estrella que es. Promedia 17.8 puntos, 8.9 asistencias, 5.2 rebotes y 2.1 robos por encuentro. Sus porcentajes de tiro son de un 49% en tiros de campo, 42% en triples y un 90% en tiros libres. 

Gordon el líder del banquillo

Durante todo el año 2017 la aportación del banquillo de los Rockets ha sido clave para la espectacular racha del equipo. Si tuviéramos que personificar en un jugador la aportación del banquillo de Houston, ese jugador sería Eric Gordon. Es el sexto hombre del equipo, y una de las principales amenazas ofensivas del equipo. Promedia 17 puntos por encuentro en el año 2017, estadística que mejora si solo contabilizamos los encuentros disputados en 2017 de esta temporada, en los que Gordon promedia 19.5 puntos, siendo el segundo máximo anotador del equipo, solo por detrás de James Harden.

El factor Anderson

Ryan Anderson se ha convertido en un jugador muy importante en los esquemas de Mike D'Antoni, ya que se trata de un cuatro que juega que se encuentra muy cómodo estando abierto, algo que se adapta perfectamente al esquema de juego ofensivo del equipo de Houston. Anderson está entendiendo esto a la perfección y su tiro exterior se está convirtiendo cada vez más en una amenaza para los rivales, sobre todo cuando se cierran demasiado en la defensa sobre las penetraciones de James Harden, es entonces cuando Anderson puede recibir y lanzar con comodidad desde la línea de tres. Su porcentaje desde la línea de tres es de un 40%, y anota 2.5 triples por partido de 6 intentos.

Harden MVP de 2017

Si algo es el factor diferencial que está teniendo este equipo durante todo 2017, ese tiene nombre propio, James Harden o "La barba", como lo prefieran. Lo que esté jugador está logrando en 2017 no tiene límites, es de ser uno de los jugadores que marcan una era. Se supera cada año, y el 2017 ha sido el año de su explosión. Esta ha venido de la mano de Mike D'Antoni, y posiblemente de una decisión que muy pocos analistas aprobarían al principio, la de colocar a James Harden como base del equipo.

Sería "la barba" la que formaría el engranaje del juego ofensivo de Houston. Ahora todo nos encaja, pero a inicios de la temporada pasada Harden estaba considerado uno de los mayores chupones de la liga, y si su juego tenía algún punto débil ese era su capacidad de crear juego y asistir. Pero Harden se transformó, varió completamente su juego, y se convirtió en uno de los mejores playmaker, sino el mejor de la liga. Hoy ya nadie discute la polémica decisión de D'Antoni, al contrario, la aplauden. Además, con la llegada de Paul ha demostrado que también puede jugar al lado de un base puro sin que su juego y estadísticas se recientan. 

James Harden está realizando otra temporada histórica | Fotografía: NBA.com
James Harden está realizando otra temporada histórica | Fotografía: NBA.com

La pasada temporada quedó segundo en la carrera por el MVP, tan solo por detrás de Mr Triple-Doble, Westbrook, que batió todos los records que pudo y más. Aunque lo cierto, es que si el premio a mejor jugador de la liga se realizara premiando al rendimiento durante el año natural, como ocurre en el fútbol, Harden sería sin duda el principal candidato y muy posiblemente el mejor jugador del año, el MVP de 2017.

La defensa el propósito de Año Nuevo

La defensa es sin duda el aspecto a mejorar de estos Houston Rockets. Son uno de los equipos que más puntos encajan por partido, y a pesar de que son uno de los mejores ataques de la liga, la defensa es siempre una de las piezas clave de un equipo que quiere optar a ganar el anillo. Cuando llega el tiempo de playoffs, el juego se endurece, los equipos comienzan a ser más sólidos, y anotar ya no es tan fácil. Es ahí cuando Houston Rockets tiene que dar el gran paso, tiene que comenzar a defender como un verdadero contender  al título de la NBA. Sin defensa no hay campeón.

¿Será 2018 el año del título?

Esta es la pregunta que los aficionados a los Rockets se hacen. Lo cierto es que nadie sabe si el año que viene será, por fin, el año en el que Houston Rockets se proclame campeón de la NBA. Lo que si sabemos es que el equipo cada vez es más sólido y competitivo, mejora cada día, cada partido, y a las alturas que estamos de temporada están al nivel de los Warriors. El tiempo pondrá a cada equipo en su sitio.

El cohete desde Houston con destino el trofeo Larry O'Brian ya está perparado.