Una semana que promete mucho. Así empezó esta última y tercera semana de la Vuelta a España 2017. Los favoritos y la fuga se encargaron de mover la carrera, como era lógico, a pesar de la cómoda renta que lleva Christopher Froome (Team Sky) tras la contrarreloj del día de ayer. Sin embargo, los elogios tienen que ser hoy para un equipo que ha batallado toda la carrera para conseguir la victoria más preciada de su historia, como conjunto; el Aqua Blue Sport corrió una etapa muy inteligente y con la envergadura de su corredor, Stefan Denifl (Aqua Blue Sport), se llevó la victoria, le sacó 28 segundos a un inmortal Alberto Contador (Trek-Segafredo) y 1:04 al grupo de Vincenzo Nibali (Bahrain-Merida) que estaba compuesto por Ilnur Zakarin (Katusha-Alpecin), la revelación Miguel Ángel López (Astana ProTeam) y Rafal Majka (Bora-Hansgrohe).
La epopeya de Denifl y la pájara de Froome
Un día relativamente nublado aguardaba al pelotón para la decimoséptima etapa. Después de una larga contrarreloj con final en Logroño, los corredores debían enfrentarse a Los Machucos, una subida durísima y determinante. La jornada salió de Villadiego hasta Los Machucos, al monumento mítico de la Vaca Pasiega (180,5 km). Tras el aumento de tiempo por parte del líder de la carrera en la contrarreloj, La Vuelta parecía sentenciada. No obstante, lo de hoy le da vida a una carrera que siempre, siempre, te da emociones y espectáculo.
La fuga estuvo compuesta por seis importantes ciclistas: Julian Alaphilippe (Quick Step), Alessandro De Marchi (BMC), Magnus Cort Nielsen (Orica-Scott), Dani Moreno (Movistar Team), Davide Villella (Cannondale-Drapac) y Stefan Denifl (Aqua Blue Sport). La escapada logró una renta hasta de ocho minutos en algún punto del día, sin embargo, solo cuatro llegaron a la base del puerto final con un minuto de renta, ellos fueron: Julian Alaphilippe, Alessandro De Marchi, Dani Moreno y Stefan Denifl.
Mientras tanto, el lote de los favoritos realizaba algunos tímidos movimientos. El Orica-Scott intentó lanzar a Esteban Chaves en el penúltimo puerto, David de la Cruz (Quick-Step Floors) también lo intentó desde lejos, el Trek Segafredo y el Bahrain-Merida también lanzaron algunos corredores. Pero el Team Sky empezó a apretar el acelerador y los intentos de escapada no dieron fruto. Todos los favoritos llegaron juntos a la base de Los Machucos donde los recibían unas duras rampas de doble dígito.
El primero en mover el árbol fue el aguerrido y joven Miguel Ángel López, lo siguió Alberto Contador. Fueron apretando el paso, por detrás el pelotón se despedazó y se conformaron dos grupos: el primero, comandado por Vincenzo Nibali donde estaban Wilco Kelderman (Team Sunweb) e Ilnur Zakarin. Unos metros atrás estaba el segundo grupo donde a la cabeza estaban todos los escuderos de Christopher Froome y él, detrás. Todo, al parecer, era una común actitud del británico cuando empieza las subidas, pero no, en realidad, el terrible fantasma de la fatiga y la falta fuerzas parecía estar asustando al nacido en Nairobi, Kenia. Por delante, Stefan Denifl dejó de lado a todos y se fue a conseguir lo heroico y casi imposible, más atrás el pinteño empezaba a engullir a los corredores de la escapada tras dejar atrás al joven colombiano. Al final, el coraje y las ganas pudieron más que las fuerzas en todos. A estas alturas de la carrera, las fuerzas están muy limitadas, sin embargo, el que tenga un poco más de entusiasmo y alma de luchador será el campeón.
Stefan Denifl alzó los brazos en línea de meta. Alberto Contador demostrando sus galones y grandes capacidades logró sacar una buena ventaja, acortando distancias con el podio. El líder de la carrera sufría y sufría, al final llegó con 1:18 de retraso sobre Contador y 42 segundos con Nibali, Zakarin y López. Los grandes damnificados del día, además de Chris Froome, fueron Esteban Chaves (Orica-Scott) quien salió del top-10, Fabio Aru (Astana Pro Team) que volvió a perder tiempo, y un poco Wilco Kelderman que dejó acercar a Ilnur Zakarin al tercer cajón del podio.
¿Está abierta La Vuelta?
Como señalábamos, en esta semana las fuerzas van al límite, ninguno va tranquilo. La crono del martes fue un desgaste supremo para varios corredores que luchan por la clasificación general. En la etapa del día hubo buenas diferencias en la llegada, el “tiburón de Mesina” está a 1:16 del líder de La Vuelta, Chris Froome, a quien hoy se le vio sufriendo y mucho.
Los primeros seis de la clasificación general van a dar espectáculo, seguro. Hay muchas disputas en esos puestos: por el podio, por el top-5, y claro, por el maillot rojo. Vincenzo Nibali ha demostrado ser un corredor con grandes estrategias y un buen planificador de la carrera. Siempre las terceras semanas le van bien. Si bien, la diferencia sigue siendo un poco amplia, una pájara como la de hoy en el mítico Angliru, le puede dejar fuera de toda opción. La jornada del sábado promete una batalla de leones.