El capitán de la selección polaca Jakub Blaszczykowski ha llegado a un acuerdo con su actual club, Borussia Dortmund, para ampliar su actual contrato en vigor durante tres temporadas más. Con esta firma, el vigente campeón germano retiene a otra de las piezas fundamentales en el esquema del técnico Jürgen Klopp. Anteriormente ya habían firmado sus renovaciones los internacionales alemanes Mats Hummels y Mario Götze.

“Kuba” está pasando por uno de los momentos más dulces de su vida. "Estoy muy contento de seguir perteneciendo al Dortmund. No hay muchos clubes que puedan mantener a sus jugadores tras lograr lo que nosotros hemos logrado estos dos últimos años. Estoy muy contento con el nuevo contrato", declaró.

El BVB también celebra su renovación. Michael Zorc, director deportivo del club, manifestó su felicidad tras el acuerdo: "Kuba es el emblema del BVB. Lo lleva en su corazón y lo ha dado todo por el club en la última temporada. ¿Cómo no íbamos a renovar a un jugador así?".

Trágico suceso infantil

La vida se le complicó desde muy joven. Con apenas 11 años, su padre Zygmunt, mató a su madre, Anna, delante de él tras una fuerte discusión conyugal. El pequeño, que jugaba entonces en el equipo de su pueblo (Rakow Czestochowa) dejó el fútbol y fue educado por su abuela. Después de la tragedia, su tío Jerzy Brezczec –excapitán de la selección polaca– lo convenció para que volviera a practicar el deporte que amaba. Pocos años después llegó al Wisla de Cracovia hasta que, en 2007, fichó por el Borussia Dortmund.

En una entrevista difundida por un canal polaco y tras haber evitado hablar del tema durante mucho tiempo, Jakub realizó las siguientes declaraciones: "Sé que ese recuerdo me va a acompañar el resto de mi vida. Daría todo lo que fuera a cambio de que mi madre estuviera viva. Lo que ocurrió dio un giro de 180 grados a mi vida. Fue como si una roca hubiera caído sobre mi cabeza y una semana después despertara y tuviera que volver a comenzar con mi vida y sobreponerme a todo como si nada hubiera ocurrido. Nunca entenderé lo que pasó ni la razón por la cuál pasó".

El padre de Jakub fue condenado a 15 años de cárcel. Desde su detención, Blaszczykowski no volvió a verle más, aunque finalmente asistió a su funeral el pasado mes de mayo.